Loading

Reporte Escucha Creativa Pichidegua, noviembre de 2018

Escuchas Creativas Cecrea

El corazón de Cecrea está en su sistema de participación permanente, pues buscamos que el programa se desarrolle a partir de las visiones, inquietudes e intereses de sus protagonistas. Su metodología principal es la Escucha Creativa, metodología participativa, lúdica y creativa que busca promover una participación activa de los niños, niñas y jóvenes (NNJ), a través de estrategias de consulta que posibilitan una constante retroalimentación de información para la toma de decisiones en cada Cecrea.

Se realiza al finalizar o durante cada ciclo programático. Para ello se invita a los/as NNJ que han participado de los laboratorios en Cecrea para conocer su experiencia, además de proyectar la programación y la vida del Centro. La Escucha Creativa pone de manifiesto el derecho de NNJ a participar y ser escuchados.

Para la Tercera Escucha Creativa se ha propuesto un recorrido por el barrio identificando lugares o espacios significativos para ellos, generando una reflexión en torno al ejercicio de derechos que permiten esos espacios (o, eventualmente, su vulneración).

Siguiendo la metodología antes mencionada, se les invitó a realizar un recorrido por el entorno, identificando lugares relevantes para el desarrollo de sus vidas, como espacios de recreación, educación, esparcimiento u otros y en cada uno de ellos identificar derechos asociados y su estado. Es decir, reflexionar sobre si esos derechos estaban siendo respetados o vulnerados. Para esto se utilizó una simbología similar al etiquetado de alimentos, con las señales “Alto en” o “Bajo en”.

Objetivo de la Escucha

El objetivo de las Escuchas Creativas 2018 es posibilitar la construcción de relatos territoriales a partir de los intereses que movilizan a los niños, niñas y jóvenes; las problemáticas o necesidades que identifican de su territorio; las ideas creativas y proyectos que imaginan para contribuir a la solución de esos problemas; y/o las fortalezas y recursos que identifican, tanto en ellos/as mismos/as como en su territorio.

La Escucha Creativa fue realizada el día jueves 15 de noviembre de 2018, a partir de las 09:30 hrs. en el Liceo Latinoamericano de Pichidegua. La actividad contó con la asistencia de 28 participantes, de los cuales 18 fueron hombres y 10 mujeres. En cuanto al rango de edad, hubo 1 participante entre los 11 y 15 años, y 27 entre los 16 y 19 años. Además 1 participante presentaba situación de discapacidad.

¿Qué hicimos?

Para conocer en detalle la metodología utilizada en esta Escucha, puedes descargar la planificación aquí.

Llegada

En esta Tercera Escucha participaron jóvenes pertenecientes al Liceo Latinoamericano, quienes están en un programa de retención escolar. Era la primera vez que Cecrea trabajaba con este Liceo y para esta actividad las autoridades se habían comprometido a explicar a sus alumnos de qué se trataría la jornada, lo cual no sucedió. Esto implicó que al inicio los participantes no entendían muy bien de qué se trataba, fueron sacados de sus clases regulares sin explicación y varios creyeron que estaban siendo castigados.

Cuando llegaron los jóvenes se realizó su inscripción y se les entregó un palito de diferente color para dividirlos en grupos. Como no tenían conocimiento previo, la encargada de Cecrea explicó brevemente qué es Cecrea y de qué se tratan las Escuchas Creativas. A continuación, se les pidió que escribieran sus expectativas sobre la convocatoria en pizarras dispuestas en la pared y que sacaran fotografías (selfies o sacadas por otras personas) y que las subieran a alguna red social utilizando el hashtag #EscuchaCreativaCecrea.

Lentamente comenzaron a escribir distintas ideas en las pizarras, comentaban que no estaban seguros de qué escribir, no entendían bien lo que estaba pasando, pero después de conversar brevemente con los facilitadores y observadores anotaron expectativas referentes a su liceo o a situaciones sociales actuales. Entre las primeras se destacaban las solicitudes de “más carreras educacionales”; “más talleres deportivos y más cupos en los talleres”.

Al respecto explicaron que su liceo tenía especializaciones que no les interesaban, por eso pedían más carreras, ya que podrían aprovechar el contexto y por ejemplo, aprender a usar maquinaria pesada para trabajar los campos. En cuanto a los talleres, los adolescentes explicaban que en su liceo hay talleres que no les interesan y que además, dado los escasos cupos para cada uno, terminan asistiendo a cualquiera.

Otras frases alusivas al liceo y que eran escritas entre risas y bromas están: “que saken (sic) a la Miriam”; “que las profes sean más bonitas y sexys”; “que saquen a la Salomé. En cuanto a estas expectativas, señalaron que estas personas corresponden a funcionarias del colegio, quienes siempre tienen una mala actitud hacia ellos. Con estas frases accedieron a sacarse fotos y luego de tomárselas, comentaron entre risas, que los expulsarían del liceo. Mientras tanto otro grupo de amigos escribió elementos que referían principalmente a situaciones sociales como: “La unión de todos los individuos”; “convivir con los migrantes”; “respeto e inclusión”.

Bienvenida

Finalizada la actividad de las expectativas, se solicitó a los adolescentes formar una fila a lo largo de todo el patio. Los facilitadores les darían una pregunta y dos opciones para escoger (una a la izquierda y otra a la derecha), y según su elección, debían saltar hacia el lado que se acercara más a su respuesta.

Las preguntas incluían temas sobre aspectos cotidianos (gustos, preferencias), su futuro y temas que llaman la atención de los adolescentes (drogas, sexo, carrete). Esta actividad motivó a los participantes y los conectó con la posibilidad de entregar su opinión de forma más espontánea.

Entre las preguntas que se hicieron se planteó “si preferían quedarse en Pichidegua o salir de la comuna”, a lo que todos respondieron que preferían salir, y “si tenían definido qué harían al salir del Liceo”, en donde destacó la cara de preocupación de uno de los participantes, quien se veía realmente afectado al tener que pensar en su futuro.

Al terminar la activación se dividieron los grupos según el color de palito seleccionado al inicio, y se dirigieron a una sala para realizar iniciar el trabajo. Al entrar, una facilitadora les pidió que hicieran algún tipo de “saludo”, lo cual transmitió una sensación de simpatía en el grupo.

Mapeo de Lugares en Función del Ejercicio de Derechos

Antes de comenzar, se les preguntó si habían escuchado antes sobre Cecrea, sólo uno había escuchado previamente sobre el centro pero ninguno había participado antes en sus actividades. Entonces se les explicó la finalidad de Cecrea como un espacio para el desarrollo de sus derechos, por lo que se les consultó qué información tenían sobre sus derechos, cuáles conocían.

Frente a esta consulta, Millaray (17 años) manifestó una situación que había sucedió en el colegio. Mencionó que la directora la había visto besándose con una compañera, por lo que le había dicho que iba a citar a su mamá para contarle lo sucedido. La facilitadora le preguntó si hubiese preferido contarle esta situación a su mamá ella misma o que lo hiciera la directora, ante lo cual señaló que prefería hacerlo en forma directa. No obstante en ese momento no se encontraba con seguridad sobre su identidad sexual. Mencionó que no sabía si continuaría en el colegio, “me siento discriminada por la directora”. Frente a esto, sus compañeros opinaron y mencionaron que no estaban enterados de esta situación, sólo uno sabía que ella tenía polola, pero el resto no y les parecía injusto que la directora la discriminara porque le gustara una mujer.

Por otra parte, los adolescentes mencionaban que se sentían aburridos en el colegio, “no me gusta ir a clase”. Se les preguntó por qué y uno de los participantes dijo su casa era más entretenida, porque había más libertad. Además mencionaron que “las salas son calurosas” (Isaac, 18 años) en verano y frías en invierno. El colegio carece de un patio que les permita salir con más libertad, por lo que no se sentían cómodos en su interior.

A continuación, se les indicó que se realizaría un mapeo de Pichidegua y el Liceo, y luego harían un recorrido para analizar dónde se respetaban sus derechos y dónde no.

Se les preguntó si sus casas eran lugares de respeto de sus derechos, a lo que contestaron sí. En relación a los carabineros, el grupo contestó que no porque “son injustos” (Isaac, 18 años). Frente a las menciones sobre los carabineros, se discutió sobre si sabían lo que significaba que se vulneren los derechos, a lo que contestaron que significaba que no se respetaran.

Manuel (16 años) señaló que le da sueño en el colegio, porque “se aburre uno”, no hay nada para entretenerse y considera que las clases son “fomes”. Sobre los métodos de enseñanza de los docentes, refieren que “siempre pasa lo mismo”; “llegan a escribir a la pizarra”. Uno de los niños mencionó que “igual enseña, pero debería ser algo más interactivo”; “o hablar más”. Sobre la relación con los docentes también mencionaron que no se preocupan por ellos, sino que “hacen su clase y chao” (Isaac, 18 años), afirmación con la que estuvieron de acuerdo los demás participantes.

Señalaron que en la aula los dejaban hacer lo que quisieran, Isaac mencionó que se veía que no había interés en ellos y en las clases porque los dejaban.

Hay gente que habla, hay gente que no hace nada, hay gente que duerme, hacen lo que quieren, realmente hacemos lo que queremos.

Se les consultó si les parecía bien esta situación, sólo uno contestó que sí y los demás mencionaron que no “porque hacen más desorden”. Isaac mencionó “encuentro que está mal, porque está bien que uno (el estudiante) no quiera hacer algo, pero por último decirle (los docentes a los estudiantes) que lo haga, porque más adelante ¿qué va a ser de la vida de la persona que está haciendo eso?”, manifestando que sería importante que los docentes se preocuparan por los estudiantes y por las clases que desarrollan.

En otro aspecto, se cuestionó la función del liceo, mencionaron que servía para que ellos aprendieran, pero sienten que es muy poco lo que aprenden porque se aburren. Dicen que los profesores les llaman la atención aunque ellos no estén haciendo algo malo, porque “son gritones” y de esa forma consideran que no respetan sus derechos. Señalaron que las clases deberían ser de otra forma, en su opinión son muy estructuradas y aunque tienen talleres de básquetbol, hándbol y teatro, son sólo una vez a la semana.

Manifestaron que no se consideraban sus propuestas para la definición de los talleres. Yostin (18 años) señaló: “sería más interesante, ahí vendríamos con ganas (al liceo), aprender lo que le gusta a uno”. Manifestando un interés claro por una temática pertinente en el territorio de Pichidegua. En relación a su futuro, Iván (19 años) mencionó “me gustaría trabajar con una empresa, crear logotipos”.

En cuanto a si se proyectaban viviendo en Pichidegua en el futuro, contestaron que sí, que no se imaginaban viviendo en otro lugar, incluso señalando “con Pichidegua hasta el final” (Isaac, 18 años). Luego se les consultó por qué querían quedarse en Pichidegua si encontraban todas las fallas mencionadas y dijeron que se debía al campo, la tranquilidad, el río, “el cerro, esa es mi vida, los animales” (Isaac, 18 años).

Respecto al hospital, consideraban que era malo, y no respetaban sus derechos, bromeando con que salían mal incluso llegando bien a él. Asimismo, mencionaron que la municipalidad era mala “porque cuando la gente necesita ayuda, no apoyan en nada” incluso cuando “son los que tienen más plata” (Isaac, 18 años).

Cierre

Al terminar la etapa anterior, se reunió todo el grupo nuevamente y comenzaron a conversar sobre la experiencia. Algunos jóvenes tenían clases o pruebas, y aseguraban que ese era el principal motivo para mantenerse en la actividad.

Se abrió la discusión para compartir lo que cada grupo había identificado en relación a sus derechos en los espacios del Liceo. Los grupos coincidieron en la mayoría de los espacios y valoraciones asignadas. También fue generalizada la opinión de que la jornada había sido “menos fome de lo que pensaban”, especialmente porque se habían sentido escuchados.

Al tocar el tema del “abuso de poder” de las autoridades del liceo, una joven añadió que ella lo había experimentado en una ocasión que estaba barriendo, y pasó una profesora y le pateó la basura que ya había recogido para que la barriera nuevamente.

Frente a la mala imagen que expresaban tener de sus profesores, se les preguntó cómo les gustaría que fueran y mencionaron un par de profesores que ellos consideraban ejemplares, porque siempre era simpáticos, los trataban bien y tenían paciencia para explicarles cuando no entendían.

El encargado de Cecrea reiteró la invitación a que participaran de los laboratorios y propusieran los temas que les interesan. En ese sentido los jóvenes expresaron su deseo por aprender sobre radio y huertos, este último específicamente porque hay varios espacios vacíos en el Liceo que podrían ser mejorados para que ellos puedan sentarse y compartir. El encargado preguntó si ese tipo de iniciativas podrían hacerlas a través del Centro de Alumnos, pero ellos manifestaron que no tenían contacto con ese grupo, que sentían que no los representaba y no acogía los intereses de los estudiantes. En ese momento, Kassandra, una de las jóvenes participantes, expresó que le gustaría postularse como representante del Centro de Alumnos y llevar a cabo todo lo que se estaba planteando.

Para terminar, se solicitó tomar una foto grupal y se les agradeció su participación en la jornada. Todos manifestaron estar muy satisfechos con la experiencia vivida.

Lo que escuchamos y observamos

En análisis de derechos realizado por los niños, niñas y jóvenes estuvo centrado en la ciudad en general por una parte y en el entorno del liceo por otra.

Análisis respecto a Pichidegua

El análisis comenzó con el mapa de la ciudad. Destacaron en primer término la plaza, ya que según ellos es el lugar más importante de la ciudad, al ser un importante punto de reunión para la comunidad. Una niña señaló que le gustaba la plaza, porque es grande y bonita, y que siempre pueden juntarse ahí con sus amigos o a pololear, es segura y que otros jóvenes se juntan ahí para andar en skate.

Luego, se enfocaron en el hospital, comentando que era un “asco”, consideran que la atención es pésima, que se vulneran los derechos de las personas cuando dejan a los pacientes esperando por horas y que incluso a veces eran mal diagnosticados, además de que el trato que recibe el público es muy malo.

Al referirse al mirador, comenzaron a reír y decirse entre ellos “tú sabes qué pasa ahí”. Hasta que comenzaron a explicar que en ese lugar “pasa de todo”, mucha droga, todos van a beber alcohol, sobre todo después de las fiestas, y que lo único que hay es una colchoneta en el piso, ante lo cual todos rieron, haciendo alusión a que era un lugar donde eran habituales las relaciones sexuales. En esta conversación una adolescente mencionó que además de esto, era un lugar peligroso, el cual está cerca de dos poblaciones. No tiene bancas ni barandas, es un pedazo de tierra sin nada. Finalmente un joven afirmó que ahí se vulneran sus derechos porque es un lugar violento y peligroso, donde nadie tiene respeto por los demás.

Sobre la Casona Cultural señalaron que es un espacio donde sería raro que se vulneraran sus derechos. Este recinto está abierto 24/7 para todos los habitantes de Pichidegua, donde siempre hay diferentes exposiciones o información sobre los eventos culturales de la ciudad.

En cuanto a la municipalidad la primera respuesta fue que no sabían nada respecto a ese lugar, pero luego de preguntarles si es que habían ido a realizar algún trámite ahí, pedir información o acompañar a alguien, recordaron distintas experiencias negativas. Un joven que mencionó que había intentado ir a sacar su licencia de conducir hace un par de semanas, y que lo habían tratado muy mal, no le habían respondido sus dudas y finalmente le dijeron que no podía obtener su licencia hasta que cumpliera la mayoría de edad. Así es que solo fue a perder su tiempo. Los demás aportaron que las señoras que atendían eran “súper pesadas, no te escuchan y siempre te derivan a cualquiera. Nunca te ayudan realmente”. Por lo que llegaron a la conclusión de que acá se vulneran sus derechos.

(En relación a la municipalidad) Hay obstrucción de la información, no te escuchan, siempre te derivan a cualquiera y son súper pesados. Ahí no somos escuchados (Américo, 17 años).

Además, agrega que la actitud con la que los atienden es desagradable, lo que obstruye aún más los canales de comunicación. Frente a esto, los compañeros apoyan las afirmaciones, respaldándolas con experiencias personales que avalan esta caracterización de la municipalidad. Es posible notar el desencanto que tienen hacia la institución, a pesar de ser jóvenes, han tenido varias situaciones con los funcionarios del lugar, que los hacen perder la confianza y los aleja de este espacio. Sólo van allí en el caso que sea estrictamente necesario y con una predisposición negativa.

Respecto al Registro Civil y al banco no tenían mucho que decir, sólo habían ido a hacer unos pocos trámites y estas experiencias no les permitían generar una opinión más profunda. Solo comentaron que fueron y lograron sacar carnet y retirar dinero sin problemas cuando lo solicitaron.

Asimismo, manifestaron tener conciencia de derechos fundamentales como la educación y la información. Identificaron la vulneración del derecho a la información con el corte de Wifi que anteriormente estaba disponible en la plaza; relacionaron el derecho a la educación y la información con la biblioteca municipal, aunque expresaron que no la visitan y varios no la conocen. Además señalaron el derecho al medio ambiente sano con algunas manifestaciones que se realizaron en la comuna para evitar la construcción de una termoeléctrica.

No quiero salir en el video porque yo hablo como huasita.

En varias oportunidades durante la actividad se escucharon comentarios de lo poco “atractivo” que resulta para algunos vivir en una comuna predominantemente rural. Por una parte ellos están expuestos a mucha información en influencia de prácticas predominantemente urbanas, pero por otra, al parecer la misma comuna y sus instituciones (municipalidad, biblioteca, colegios, etc.) no generan una oferta de entretenimiento, ni educación acorde al contexto en el viven. Eso al parecer genera una falta de identidad, pertenencia y proyección entre sus jóvenes.

Dígame, entre la juventud, ¿a quién le gusta leer o ir a la biblioteca?

La mayoría señaló conocerla, pero no la visitaban porque no lo encontraban atractivo. Manifestaron tener una imagen anticuada de la biblioteca, sin encontrarle utilidad ni vínculo con sus intereses. Llama la atención de la frase que consideran “extraño” que una persona joven la visite, pero además demuestra que no han sido beneficiarios de estrategias innovadoras para fomentar o motivar el gusto por la lectura.

Análisis respecto del Liceo

Por otra parte, el grupo que dibujó el Liceo identificó lugares como la dirección, la inspectoría, el área PIE, salas de música y arte, el casino, su sala de clase y el hall de acceso. Estos fueron los lugares que posteriormente fueron visitados por el grupo y en donde se instalaron los sellos. En la entrada del Liceo dibujado escribieron “Bienvenidos a la cárcel”.

Los lugares visitados y calificados por el grupo fueron:

Inspectoría / hall de acceso: bajo en derechos a la identidad. Al ser el punto de acceso al Liceo, en este lugar revisan que los estudiantes cumplan con el código de presentación (uñas, pelo, maquillaje, ropa, etc.) y ellos se sienten vulnerados.

Dirección / oficinas de administración: alto en abuso de poder. En términos generales, tiene muy mala relación con las autoridades. Sienten que no son escuchados ni respetados. El sello lo crean haciendo alusión a situaciones en las que se ven enfrentados a profesores y sienten que siempre van a tener la posición de mayor desventaja. Esta mala relación fue reafirmada por la reacción de la persona que estaba en uno de los escritorios, quien cerró la cortina cuando el grupo llegó a la oficina, y los jóvenes se sintieron atacados y rechazados.

Sala PIE: alto en ayuda al alumno. Afirman que en esta oficina ayudan a todos los estudiantes cuando tienen cualquier tipo de dificultad. Se sienten escuchados y protegidos.

Sala de música: alto en expresión, creatividad, cultura y arte. Sienten que es la única sala del Liceo en donde pueden crear y expresarse libremente.

Sala de arte: alto en creatividad y libre expresión; bajo en materiales. Los jóvenes manifestaron que se sienten en libertad de crear en este espacio, pero generalmente no pueden hacerlo por la baja dotación de materiales e implementos necesarios.

Casino: alto en servicio, amor, comunicación y alimentación. A dos trabajadoras del casino les entregaron además sellos de “alto en cariño” y “alto en ricura”. Según manifestaron los jóvenes, el casino es otro de los lugares en donde se sienten mejor, sin presiones, pueden conversar, reciben alimentación sin costo y todo el personal los trata con mucha amabilidad.

Sala de clase: bajo en peleas, en amenazas y en bullying. Según expresaron los jóvenes, entre ellos se han organizado para frenar las amenazas y peleas que surgen como parte de los conflictos entre grupos más grandes que hay en el Liceo. Ellos mismos se han encargado de evitar que las peleas escalen de nivel.

Pizarra con ruta cultural de Pichidegua (producto de un taller de turismo): Alto en cultura

Laboratorio de ciencias: Alto en seguridad, expresaron que entre todos crearon un manual de trabajo para evitar accidentes.

Baños: Bajo en agua, ya que las autoridades la cortan cuando los estudiantes juegan con ella.

Quiosco: alto en precios. Afirman que es poco asequible en relación a la situación económica de los estudiantes.

En inspectoría no me dejan hablar, cuando me llevan, me piden que explique qué pasó, pero cuando lo intento, me cortan la palabra (Diego, 17 años).

Esta frase refleja que Diego siente represión cuando se encuentra en inspectoría. En ésta no puede expresar sus ideas o postura frente a lo que se discute en el momento, a pesar de que se le da instrucciones de hablar. Estas contradicciones son dinámicas cotidianas al interior del liceo según lo manifestado por varios participantes, quienes identifican una mala comunicación y violencia de parte de las autoridades del establecimiento.

Queremos más carreras educativas (…) acá hay harto campo y me gustaría aprender a usar maquinaria pesada para trabajar ahí mismo (Américo, 17 años).

En su opinión las carreras que ofrece el liceo no están acordes a sus intereses y a los de la mayoría de los estudiantes. Se preguntaba por qué no utilizaban el espacio donde se encontraban, ya que como Pichidegua está rodeado de campo era muy útil alguna carrera donde se les enseñara a utilizar maquinaria pesada, lo que posibilita un lugar para hacer la práctica y luego insertarse en el mundo laboral.

A veces uno tiene que discutir con el profesor y siempre va a ganar el profesor…como que tiene el rango más alto.

La mayoría de los participantes expresaron tener problemas y ser enviados a la Dirección frecuentemente. Por lo mismo, al hablar de la Dirección, afirman que no son escuchados sus motivos, y cuando se ven enfrentados a un profesor siempre pierden, aunque tengan la razón. Esto ha generado una sensación de impotencia, lejanía y desconfianza hacia las autoridades del Liceo.

(Respecto al quiosco del liceo) Alto en precios (risas) (…) se vulneran nuestros derechos, ya que no se respeta la situación económica de los alumnos (Américo, 17 años).

Este joven siente que de esta forma se están vulnerando sus derechos, debido a que no se respeta la situación económica de los demás estudiantes, asumiendo que todos tienen acceso a alimentación por los valores que maneja el único lugar del colegio donde venden comida.

(Respecto a un sector apartado del liceo) Acá todos se vienen a drogar en frente de los demás. Les da lo mismo, le dan ese ejemplo a los más chicos, y los profes o inspectores no hacen nada (Américo, 17 años).

Esta mención se refiere a un espacio en el patio, donde se acumula material como cartones, barriles, mesas y rejas en mal estado. En este, pegaron dos sellos “alto en drogas” y “bajo en apoyo, autoridad”, debido a que era un espacio donde los estudiantes más grandes se iban a drogar, sin importar el horario o el lugar en el que se encontraban. Y que a pesar de la situación, las autoridades del colegio no hacían nada por revertir o poner un alto a este hecho.

Los jóvenes tienen conocimiento de este tipo de situaciones que ponen en riesgo a los demás estudiantes. No comprenden por qué las autoridades omiten este tipo de prácticas, siendo a las que deberían poner mayor atención. En este sentido sienten cierto olvido por parte de las autoridades, habilitando este tipo de espacios “sin normas” al interior del establecimiento educacional.

Si tenemos áreas verdes y espacios para descansar mejoraríamos la comunicación entre nosotros, así podríamos conocernos y saber que lo que se dice del otro es mentira (Joselyn, 17 años).

En su opinión, la falta de áreas para compartir y descansar dificulta el desarrollo de instancias para conocer a los demás estudiantes. De esta forma, el contar con estos espacios, mejoraría la comunicación, conocerían mejor a los compañeros y derribarían los rumores que se crean en torno a los demás.

A partir de estas ideas es posible notar que los jóvenes perciben un ambiente y convivencia hostil entre estudiantes, donde en palabras de ellos mismos “reina la envidia”, y les gustaría hacer algo para mejorar este panorama.

Por último tener un técnico agrícola y veterinario para estudiar acá mismo, ni eso tienen (Isaac, 18 años).

Plantea que le interesaría que las carreras o talleres del liceo tuvieran mayor relación con la realidad territorial de la ciudad y los recursos naturales disponibles.

En la oficina del PIE nos ayudan a todos. Si nos falta imprimir algo o no entendemos algo.

En varias oportunidades durante la actividad, los participantes expresaron que los profesores del PIE siempre están dispuestos a ayudarlos y escucharlos. Al parecer, incluso ante la falta de una enfermería en el Liceo, estos profesores son los que asisten a los estudiantes.

Pero ¿para qué vamos a pedir? Mejor es no hablar (Isaac, 18 años)

Isaac considera que no hay razón para seguir proponiendo mejoras para su liceo, porque no se siente escuchado. Es posible reconocer una vulneración a su derecho a ser escuchado y a expresarse, aunque no es un derecho que él pueda identificar de manera clara.

Conclusiones

Desde el proceso de planificación, esta Escucha significó un reto para todo el equipo, porque se trabajaría con un grupo que no había participado antes en Cecrea, considerado “problemático” y la relación entre Cecrea y el Liceo Latinoamericano no había sido muy fluida. Sin embargo, para todo el equipo fue una jornada bastante provechosa porque los participantes tuvieron buena disposición para entregar información.

De todas maneras, es importante destacar que la recopilación de información no fue fácil, ya que los jóvenes no tenían mucho conocimiento sobre sus derechos, desarrollaban poco sus ideas y mucho de lo que decían era en broma o hablaban todos al mismo tiempo. De cierta forma, estos podrían ser indicadores de un grupo que no está acostumbrado a comunicarse ni a ser escuchado, NNJ que no trabajan su libertad de expresión.

Durante la Escucha y sus diferentes etapas, los adolescentes lograron identificar la relación que tenían con diversas instituciones y espacios, generando reflexiones frente a las dinámicas en las que se ven envueltos cotidianamente. De esta forma, emergieron diferentes opiniones y puntos de vistas a medida que se sentían con la confianza para expresarse. Entre estos elementos surge la identificación de muchos espacios donde se sienten vulnerados o pasados a llevar tanto por autoridades, compañeros o instituciones, lo que da cuenta de una violencia cotidiana a la que están expuestos.

En relación a la ciudad de Pichidegua identificaron la municipalidad, la escuela, la biblioteca y el hospital como instituciones vulneradoras de derechos; y la plaza y la casona como lugares protectores

Entre los lugares a destacar al interior del Liceo se encuentran: salas precarias donde la mala relación entre alumnos y entre estudiante/profesor es una realidad del día a día; mala relación entre estudiantes con los directivos, donde los estudiantes no tienen espacio para expresarse, siendo las dinámicas represivas algo común; baños con problemas de higiene e infraestructura, exponiendo a los estudiantes un espacio insalubre; áreas de baja presencia de autoridad lo que abre un espacio para el consumo de drogas y enfrentamientos entre alumnos; escasez de espacios de descanso y esparcimiento para los adolescentes.

Por otra parte, los participantes identificaron como elementos positivos: el comedor como un lugar en que se les ofrece alimentación, y la relación que tienen con los adultos en ese espacio; también destacaron el apoyo que reciben de dos profesores y de las encargadas del PIE, quienes los ayudan sin importar si pertenecen o no al programa.

Otro aspecto a destacar es la relación con el espacio que habitan cotidianamente. Desde la dinámica de activación, los jóvenes expresaron poco sentido de pertenencia e identidad con su comuna. Esto al parecer se debe a que no ven muchas opciones de futuro allí, ni encuentran una oferta de educación o entretenimiento que los motive a proyectarse en la comuna. Sin embargo, al indagar un poco más profundo, los jóvenes sí conocen y se interesan por iniciativas como el turismo cultural, la agricultura y el cuidado del medio ambiente, pero faltan más oportunidades para desarrollarlas.

Cecrea representa una oportunidad para este grupo de jóvenes, a través de una oferta de laboratorios y actividades que pueden ser de su interés. La mayoría del grupo que participó en el cierre de la jornada expresó su interés de vincularse a Cecrea, pero solamente en aquellas actividades que se realicen en el mismo Liceo, porque no viven en el área urbana y el bus sale hacia sus casas cerca de las 16:00 horas. Esto representa un riesgo en tanto depende de las voluntades de las autoridades del Liceo, las cuales ya se mostraron con poca disposición.

Que la actividad fuera realizada en el establecimiento educacional plantea nuevos desafíos, esto dado que los profesores y autoridades del establecimiento tienen la facultad para distraer y sacar a los estudiantes de la actividad, tal y como ocurrió con parte del grupo rojo, quienes se quedaron con una profesora en la dirección durante gran parte de la Escucha, logrando reintegrarse en las últimas etapas de ésta.

Además, fue posible notar cómo las autoridades estaban un poco inquietas e incómodas con la presencia de Cecrea en el Liceo, ya que no dejaban de observar y seguir a sus estudiantes a los diferentes lugares que visitaban, entregando comentarios que aludían a que esta intervención podía perjudicarlos.

Finalmente, la actividad da cuenta de la necesidad que tienen los niños, niñas y jóvenes de ser escuchados. Ellos tienen muchas ideas, propuestas y cosas que decir, pero están acostumbrados a ser ignorados, callados o reprimidos por las distintas autoridades del establecimiento, por lo que han tomado una postura de “sumisión” frente a los diversos acontecimientos ocurridos en su cotidianeidad. Es por esto que, acogieron de buena forma la Escucha Creativa de Cecrea, preguntándose incluso por qué no habían establecido antes un vínculo con ellos, debido a las múltiples inquietudes y ganas de desenvolverse en un ambiente que los represente.

Desafío Cecrea

Como Cecrea Pichidegua, ¿qué haremos con esta información?

Cecrea se quiere hacer cargo de aquello que se levantó en la Escucha Creativa. A través de un proceso de validación y proyección de esta información, denominado “devolución” hemos considerado los diferentes temas, opiniones, anhelos y expectativas de niños y niñas y jóvenes para levantar una programación coherente con sus intereses.

Credits:

Cecrea

Report Abuse

If you feel that this video content violates the Adobe Terms of Use, you may report this content by filling out this quick form.

To report a copyright violation, please follow the DMCA section in the Terms of Use.