Escuchas Creativas Cecrea
El corazón de Cecrea está en su sistema de participación permanente, pues buscamos que el programa se desarrolle a partir de las visiones, inquietudes e intereses de sus protagonistas. Su metodología principal es la Escucha Creativa, metodología participativa, lúdica y creativa que busca promover una participación activa de los niños, niñas y jóvenes (NNJ), a través de estrategias de consulta que posibilitan una constante retroalimentación de información para la toma de decisiones en cada Cecrea.
Se realiza al finalizar o durante cada ciclo programático. Para ello se invita a los/as NNJ que han participado de los laboratorios en Cecrea para conocer su experiencia, además de proyectar la programación y la vida del Centro. La Escucha Creativa pone de manifiesto el derecho de NNJ a participar y ser escuchados.
Para esta Escucha Creativa se ha propuesto un juego de simulación: ha sucedido una catástrofe en la Tierra, se ha acabado el agua y debemos abandonar el planeta. Los primeros en realizar el viaje para salir de la Tierra serán los participantes de Cecrea.
Antes de realizar el viaje, tendrán 90 minutos para diseñar los espacios que tendrá la nave espacial y pensar en actividades que quisieran hacer durante el año que durará el viaje. Además, elaborarán un perfil de los adultos que podrán acompañarles en la travesía.
Una vez realizado el viaje se realizará un rito para refundar las ciudades en el nuevo planeta, identificando qué quieren conservar de sus ciudades actuales, que cambiarían y qué sueñan para esa nueva ciudad.
Objetivo de la Escucha
El objetivo de las Escuchas Creativas 2018 es posibilitar la construcción de relatos territoriales a partir de los intereses que movilizan a los niños, niñas y jóvenes; las problemáticas o necesidades que identifican de su territorio; las ideas creativas y proyectos que imaginan para contribuir a la solución de esos problemas; y/o las fortalezas y recursos que identifican, tanto en ellos/as mismos/as como en su territorio.
La Segunda Escucha Creativa fue realizada el día viernes 12 de octubre de 2018, a partir de las 16:00 hrs., en Cecrea Arica. La actividad contó con la asistencia de 35 participantes, de los cuales 16 fueron hombres y 19 mujeres. En cuanto al rango de edad, 14 participantes tenían entre 7 y 10 años, 16 entre 11 y 15 años, y 5 entre 16 y 19 años. Asimismo, hubo 6 participantes que pertenecían a pueblos originarios y 3 que presentaban situaciones de discapacidad.
¿Qué hicimos?
Para conocer en detalle la metodología utilizada en esta Escucha, puedes descargar la planificación aquí.
Llegada
La jornada se inició a las 16:00 hrs., con la llegada y recepción de los niños, niñas y jóvenes convocados para la actividad, para lo cual se procedió a inscribirlos en una planilla de asistencia, y luego invitarlos a pasar al frente de la entrada de Cecrea, donde había dispuesto un rollo de papel blanco extendido en el suelo.
Allí Ocarina, una facilitadora caracterizada con un traje estilo espacial, con maquillaje y peinado ad hoc, fue recibiendo a los NNJ, dándoles la bienvenida, los saludó en lengua aymara a lo cual algunos NNJ respondieron también en aymara. Les explicó que la idea era plasmar sus expectativas, escribiendo o dibujando sus deseos respecto a la Escucha que se iba a desarrollar, lo que generó gran entusiasmo en los más pequeños.
Aparentemente la mayor parte de los participantes se conocían, ya que conversaban de manera muy familiar, bromeaban, gritaban y se divertían escribiendo. Los más pequeños se involucraron inmediatamente en la actividad, mientras que los adolescentes se demoraron un poco y se escuchó decir “no se me ocurre qué hacer”. Finalmente, en el lienzo se plasmaron frases como: “va a ocurrir un milagro”, “comer”, “leer”, “palabras”, “diversión”. La mayoría dibujó las cosas que les gustaban como: gatos, notas musicales, flores, corazones, etc.
Una vez terminada esta actividad, se invitó a todos los participantes a hacer ingreso al recinto y dirigirse al segundo piso.
Bienvenida
Los niños, niñas y jóvenes se dirigieron a un amplio salón lleno de espejos, ubicado en el segundo piso. Allí se les invitó a formar un círculo, tomarse de las manos, y recordar quién era el compañero de la mano izquierda y quién era el de la mano derecha. Luego indicaron: “a la cuenta de tres, todos se van a desordenar”. Todos se desordenaron hasta decir alto, luego de lo cual, debían buscar al compañero de su mano derecha y el de su mano izquierda y volver a tomarse las manos. Todos quedaron apretados y enredados. La idea ahora era desenredarse y volver a formar el círculo. La experiencia resultó entretenida, los participantes se reían y hacían bromas.
Luego de terminada esta dinámica de activación, se les dio el saludo inicial y bienvenida de parte de Cecrea, agradeciendo que participaran de la Escucha. Luego se les preguntó: ¿quién ha participado en una Escucha Creativa antes? Algunos levantaron las manos, y se procedió a explicar los objetivos de la jornada.
Luego se invitó a tomar asiento y ver un video con un extra noticioso, que informaba sobre una crisis mundial por la sequía y falta de agua, y se invitaba a los niños de Cecrea a realizar un viaje espacial para refundar la ciudad en un nuevo planeta. Para esto deberían diseñar una nave espacial y definir las características del adulto que los acompañaría en este viaje de 1 año de duración.
A continuación se llamó a los pilotos que serían los encargados de ayudarlos a diseñar esta nave, y se formaron tres grupos, los cuales fueron conformados por participantes de similares edades. Cada uno fue identificado con un timbre de diferente color y forma, por ejemplo: equipo caracol, en donde todos fueron timbrados en la frente con un caracol, etc. De esta forma, si alguien andaba perdido, podía identificar su grupo por el color y la forma del timbre que llevaba.
Los grupos se dividieron en 3 espacios separados dentro del salón para iniciar el trabajo.
Preparación del Viaje
Para iniciar la preparación del viaje, cada piloto le dijo a su grupo que estarían viajando un año y que debían definir la mejor distribución de la nave. Algunas propuestas incluyeron: dormitorios, baños, cocina, sala de juegos, bodega de almacenaje de comidas.
El grupo con participantes de entre 7 y 9 años aproximadamente, incluyó entre sus propuestas cosas básicas como baños, dormitorios, etc., pero también áreas de estudios, áreas de juego, un área de huertos para plantar hierbas, verduras “para tener que comer”. También una zona de libros, bibliotecas y escuela. Pensaron además en una bodega de oxígeno.
El grupo de entre 10 y 12 años, incluyó en su nave piscinas y zonas de computadores.
Por su parte el grupo de jóvenes de entre 15 años y más, incorporó salas de videojuegos y áreas de descanso, como lugares para tocar o escuchar música o ver películas. Propusieron dormitorios separados para mujeres y hombres, aunque otros grupos propusieron dormitorios compartidos, así como también los baños.
Otras propuestas apuntaron a incluir salas de juegos, zonas de almacenamiento, zonas de baile, lugar donde poner árboles, recursos naturales, enfermería, sala de relajación, laboratorios, nave de emergencia, etc.
Luego se les pidió definir las características del adulto que los acompañaría en el viaje y los niños que irían, escribiendo o poniendo emoticones en unas siluetas humanas que estaban trazadas en las paredes representando a un adulto y un niño.
Algunas propuestas para el adulto incluían: inteligente, que sepa escuchar, que sepa primeros auxilios, que sepa hacer de todo un poco, disciplinado, no puede ser enojón, que tenga autoestima, que tenga fuerza.
En cuanto a los niños que viajarían, destacaban: inteligente, que se porte bien, educado, que sea divertido, soñador, valiente, humilde, que le guste bailar, confiado de sí mismo, que cumplan las promesas, etc.
Una vez terminada esta etapa, una voz a través de un micrófono pidió formar un círculo, luego se apagaron las luces, y una facilitadora que hablaba muy pausadamente, comenzó a realizar la preparación de los participantes para el viaje.
Para ello se acostaron en el suelo para así hacer un ejercicio de relajación, cerraron los ojos y otros facilitadores los fueron pintando con pinturas flúor. Se puso una música ambiente de fondo, y la facilitadora con tono suave les fue diciendo que debían respirar, inhalar y exhalar suavemente e ir pensando en qué querían llevar a la nueva ciudad. Al terminar la actividad, la mayoría expresó sentirse muy bien.
Luego de esto, quedaron muy relajados. Una voz de fondo indicó por parlante que debían evacuar el recinto, para iniciar el viaje.
El Viaje
En esta etapa, el grupo se dividió en 2. Un grupo bajó al subterráneo donde los esperaba la nave y el otro que se quedó en el salón del segundo piso.
Al bajar los niños con los facilitadores, todos cooperaron para que esto se hiciera de la mejor forma posible. Fueron acompañados hasta el subterráneo de Cecrea, y se escuchó la voz de un facilitador ordenando cómo debían abordar la nave, los participantes se veían muy contentos y ansiosos de ver que había detrás de la puerta.
Al entrar al salón había una gran pantalla con la imagen de una nave con el espacio infinito del universo. Los niños, niñas y jóvenes se mostraron asombrados y luego se sentaron en las colchonetas para tomar posiciones. Se les fue dando un relato mientras todos se acomodaban y se les dio la instrucción de abrochar sus cinturones.
Luego se realizó el despegue, los participantes se conectaron con la experiencia, los sonidos, el audio, las imágenes, el humo daban una atmósfera especial. Parecían viajar en verdad hacia otro planeta. Al terminar estaban todos muy fascinados. Luego volvieron a subir al segundo piso.
Por su parte, el otro grupo se quedó en el salón de los espejos en el segundo piso. Ellos escribieron mensajes en unos papeles en blanco donde expresaron qué se llevarían al nuevo planeta y qué no.
Estaban sentados en círculo, algunos acostados, otros apoyados entre compañeros, otros más cercanos a los facilitadores, todos muy atentos. Algunos mensajes fueron profundos, sobre todo los de los participantes mayores. Por ejemplo, Gabriela, 15 años “hay guerras y conflictos por culpa de la religión, hay discriminación por el sistema que está formada la sociedad, existen problemas y penas de las personas que las conducen a las drogas. Hay muerte de personas inocentes y hay aplausos para los culpables”.
En el caso de los más pequeños de 7 u 8 años planteaban que llevarían a sus familias y flores al nuevo mundo y no pensaban en guerras, aún manifiestan esperanzas de que se pueden cambiar las cosas. Lo más grandes eran más tajantes, planteando que el ser humano nunca va a cambiar, que era cosa de ver la historia.
En general, ellos se llevarían cosas deliciosas para comer, series de TV que les gustan como Steven Universe, tablets, sus papás, flores, la playa, el cielo, la luna, sus amigos, cosas que en general los aferran a su ciudad y hogar, porque son sus lugares comunes.
Refundación de la Ciudad
Para realizar la refundación de la ciudad en el nuevo planeta, las facilitadoras distribuyeron hojas de papel para que todos los participantes pudieran escribir a modo de reflexión qué recuerdos querían dejar en la Tierra. Algunos los dijeron en voz alta: la inocencia, mi familia, cuadros de la familia, mascotas, mi hermanito, mi casa.
También se les pidió que expresaran cuáles serían sus deseos para el nuevo planeta, algunos mencionaron sus cosas favoritas, como: animé, consolas, gatos.
Cierre
Estando ya en el nuevo planeta, los participantes se tomaron de la mano haciendo un círculo y se sentaron en el piso. Una facilitadora preguntó por qué habían tenido que dejar el planeta y las respuestas fueron diversas: porque iba a explotar, por la contaminación, porque nos trataron de introducir en su historia de la contaminación del planeta, porque podría explotar por las aguas calientes, por una sequía mundial. Se generó mucha conversación y la facilitadora tuvo que mediar para organizar la participación levantando la mano y permitiendo que todos respondieran, manteniendo silencio y escuchando a la vez como signo de respeto.
Un niño preguntó: "¿por qué sentarnos en círculo?" (aludiendo a la posición que estaban), a lo cual contestaron entre ellos: "es como el planeta"; "para mantener la energía"; "para vernos las caras".
Asimismo se les consultó a los participantes por qué era importante no contaminar y reciclar. Hubo respuestas variadas, como que el cartón se podía reciclar haciendo basureros, que se podían utilizar lavalozas naturales para no contaminar las aguas, que algunos reciclan tapas y cartón. Un niño mencionó un proyecto que habían hecho en su colegio con materiales reciclados elaborando una cancha de fútbol.
Un niño manifestó que se podía empezar de cero en esta nueva ciudad, como había sido en un principio la sociedad, a lo que otra niña manifestó su desacuerdo, planteando que el hombre es así y ya nada lo cambiará.
Luego de compartir estas reflexiones, se dio por finalizada la experiencia y se les invitó a un cóctel en la recepción como cierre de la jornada.
Lo que escuchamos y observamos
En la Segunda Escucha Creativa realizada en Arica, se levantaron las inquietudes e intereses de los niños, niñas y jóvenes asistentes al Cecrea. Ellos manifestaron sus gustos e intereses por medio de actividades lúdicas relacionadas con un viaje a otro planeta, con el fin de hacer frente a la escasez de agua en su ciudad y en el país en general.
En la etapa de planificación del viaje, se pidió a los participantes definir las distintas secciones o salas que debería tener la nave espacial a diseñar. Entre las principales propuestas surgieron: baños, comedor, piezas (para mujeres y hombres, y otros grupos propusieron piezas compartidas), áreas de estudios, zonas de computadores, áreas de juego, zonas de baile, salas de videojuego y áreas de descanso: lugares para tocar o escuchar música o ver películas, piscinas, área de huertos para plantar hierbas y verduras “para tener qué comer”, zona de libros, bibliotecas, laboratorio, escuela.
¿Tendremos escuela en la nave?
Al realizar el análisis de las secciones que debería tener la nave, y tratando de distribuir bien los espacios y el lugar para almacenamiento, se cuestionaban dónde estaría la escuela para educar a los niños, niñas y jóvenes. Es importante para ellos este espacio ya que manifiestan que entre ellos mismos se educarán y compartirán conocimientos. Será como una sala de formación mixta.
Habrá algún espacio para los creyentes en Dios. Hay que hacer una iglesia dentro de la nave
La discusión comienza con una joven que les expone que viajarán con ellos niños y personas creyentes en Dios y que hay que considerar ese espacio, pero por mayoría no lo consideran y uno argumenta: Dios no existe y punto. Nadie discute más el tema.
También propusieron incluir una bodega de oxígeno, zonas de almacenamientos, un lugar donde poner árboles, recursos naturales, enfermería “tienen que haber médicos y enfermeras para acompañarnos porque algunos van a enfermar y hay que tener medicamentos e implementos”, sala de relajación, nave de emergencia, cañones, sector de desechos, una sala de vigilancia “porque podemos ser atacados”, etc.
Las zonas de descanso se pedían en zonas altas de la nave para poder mirar el espacio desde ahí. Entre los elementos que pensaban llevar al viaje indicaron: comida, televisión, Play Station, Internet, plantas, memes, aves, naturaleza, completos, aire, etc.
Alimentación necesaria para todos en el viaje
Entre los elementos a llevar, los NNJ concuerdan con que el alimento debe ser prioridad en el viaje, además deberán considerar reciclar e incinerar. Buscar cómo almacenar lo suficiente para un año de viaje y llevar agua en distintos tipos de contenedor para el consumo. También quieren llevar árboles frutales durante la travesía para poder plantar en el nuevo planeta. Incluso una niña menciona que ella sabe cocinar y que podrá ayudar en esa labor.
Por otra parte, se les pidió definir las características que debería tener el adulto que los acompañaría en el viaje. Algunas propuestas fueron: alegre, divertido, inteligente, que sepa escuchar, que sepa primeros auxilios, que sepa hacer de todo un poco, disciplinado, no puede ser enojón, que tenga autoestima, que tenga fuerza, de buen corazón, que sea gracioso, con buenos sentimientos, que maneje bien sus emociones, que exprese lo que siente, buen amigo, que tenga voz de Darth Vader, que sea psicólogo.
Que sean más divertidos (Joaquín)
Explicando que la mayoría de los adultos de su entorno son fomes y amargados. Joaquín habla con mucha naturalidad, no se desprende de su frase ni rabia ni resentimiento. Sorprende que siendo una crítica a los adultos en general lo diga como si fuera algo natural.
Que sean más buena onda (Lucas)
Ya que en su opinión los adultos son mala onda, en especial sus padres. Esto se entiende como una característica de la edad, ya que es sabido que entre la pubertad y la adolescencia se tiende a ser muy crítico con los padres. Para muchos niños, niñas y jóvenes los padres mala onda son aquellos que imponen disciplina en contraste a aquellos padres que se sienten amigos de sus hijos y no instalan normas de conducta en casa.
Asimismo se les pidió indicar las características que deberían tener los niños que realizarían ese viaje, ante lo cual plantearon: inteligente, que se porte bien, educado, divertido, soñador, valiente, humilde, que le guste bailar, confiado de sí mismo, que cumplan las promesas, no peleadores, cuidadores, independientes, menos gritones.
Los niños que vayan al otro planeta no deben ser mentirosos (Anais, 8 años)
Ante esta afirmación se le preguntó: ¿es que acaso los niños son mentirosos? Anais respondió afirmativamente y agregó: “yo soy mentirosa”, pero agrega que no dirá más mentiras para poder hacer el viaje.
Luego se les planteó el desafío de pensar cómo quisieran refundar su ciudad en este nuevo planeta, qué cosas conservarían y qué cosas cambiarían. Algunas ideas mencionadas fueron: llevar a sus familias “porque ellos te cuidaron por toda la vida”, flores, la paz y tranquilidad, las mascotas, la casa, un animé, el Manjarate, la playa, el cielo, la luna, sus amigos.
También hubo otras opiniones indicando que no sería posible cambiar en un nuevo planeta.
Hay guerras y conflictos por culpa de la religión, hay discriminación por el sistema que está formada la sociedad, existen problemas y penas de las personas que las conducen a las drogas. Hay muerte de personas inocentes y hay aplausos para los culpables (Gabriela, 15 años)
Somos como somos. No vamos a cambiar. No aprendemos. Hubo una primera guerra, luego una segunda guerra mundial y no aprendimos (Ester, 12 años)
No solo fue su opinión, sino el ímpetu con el que se expresó, con un convencimiento total. Se mostraba muy decepcionada de la humanidad.
La misma persona que bota un cigarro es la misma que se queja de la basura
Finalmente, al realizar el cierre de la jornada, en general las opiniones planteadas por los participantes fueron muy positivas.
Me pareció muy divertida. Hay que cuidar el planeta (Paz, 7 años)
Estuvo muy bien, para crear algo divertido a los niños (Tiare, 13 años)
Esta instancia hace reflexionar a los niños, para tomar un poco de conciencia, en temas de reciclaje, cuidar el medio ambiente. He venido a otras Escuchas y me gustó mucho la experiencia de hoy (Cristóbal, 17 años)
La experiencia me gustó mucho porque es como aprender cosas como la contaminación del mundo, me gustó mucho todo y me gusta reunirnos acá y hablar sobre algún tema (Juliana, 8 años)
El evento de hoy me gustó, en algunos momentos casi me da pena, cuando vi a las vacas. Nos íbamos en la nave espacial y me dio penas ver a las vacas que se quedaban en la Tierra. Igual me sentí entretenido cuando estábamos construyendo la nave espacial, habían unas palmeras, y unas máscaras que tenían que ver, había una de un marciano (Alonso, 10 años)
La cita de Alonso expresa lo vívida que fue la Escucha en la etapa de El Viaje, pues en la proyección de video del espacio jamás se vieron vacas, lo que da cuenta de cuánto voló la imaginación de los NNJ, hasta el punto de entristecerse de lo que dejaban en la Tierra.
Conclusiones
La Segunda Escucha Creativa de Arica, dedicada a hacer vivir un viaje ficticio a otro planeta, no solo se constituyó en un juego, hubo momentos de gran realismo que hicieron vivir la experiencia de manera muy intensa provocando emociones, temores y reacciones.
A nivel de facilitadores cabe destacar las caracterizaciones de cada uno de ellos y del equipo de apoyo de Cecrea Arica, lo que le otorgó mayor realismo e hicieron vivir una experiencia emocionante y de mucha interacción. Las dependencias y materiales fueron bien distribuidos y el apoyo logístico de alto nivel, que permitió que todas las dependencias estuviesen preparadas para enfrentar cada una de las acciones y sobre todo el respeto de los tiempos.
La interacción de los NNJ y los facilitadores y equipos de apoyo fue muy positiva. Había una relación muy sana, activa, muy coloquial y familiar. Tanto niños, niñas y adolescentes son capaces de vincular lazos afectivos con su entorno, considerando que para ellos es importante en este viaje su familia y mascotas.
Consideran que las horas de esparcimiento son fundamentales para sus vidas y que tener ciertas comodidades que tienen en su vida cotidiana les servirá para lograr la meta de llegar a refundar un nuevo planeta con expectativas de vida superiores a lo que han vivido hasta ahora, considerando los perfiles que confeccionaron de los niños y adultos que desean viajen con ellos a este nuevo planeta.
Entienden que los recursos en la Tierra se están agotando, que la contaminación con desechos ha colapsado en muchos países y que desde ahora debemos comenzar a revertir esta situación. Se entiende que por ahora el método es crear conciencia de que todos debemos aportar para aprender a reducir, reutilizar y reciclar.
Desafío Cecrea
Como Cecrea Arica, ¿qué haremos con esta información?
Cecrea se quiere hacer cargo de aquello que se levantó en la Escucha Creativa. A través de un proceso de validación y proyección de esta información, denominado “devolución” hemos considerado los diferentes temas, opiniones, anhelos y expectativas de niños y niñas y jóvenes para levantar una programación coherente con sus intereses.
A partir del cruce de listado de necesidades expresadas en las diversas actividades, es que se generan tres líneas de acción por cada rango etario.
El primero de 7 a 10 años cuenta con tres líneas de acción:
- Primero de manera transversal se propone trabajar durante la Escucha de cada sesión, sobre enfoque y violencia de género, de manera de reflexionar acerca de la relación y trato entre hombres y mujeres, y a partir de eso generar los acuerdos de convivencia interna de cada grupo, donde se propone trabajar a través de pedagogía de la expresión.
- La segunda línea de acción es sobre el medio ambiente en el arte, buscando generar una reflexión crítica sobre el medio ambiente a través de las artes, utilizando las ciencias como metodología creativa para desarrollar procesos de creación artística colectiva.
- La tercera dice relación con la integración de la música y la tecnología como herramienta de expresión rítmica, visual y escénica explorando la integración de artes y disciplinas que pueden converger en la música, entregando la oportunidad a los NNJ de tener experiencias significativas con la creación musical y auditiva, valorando las posibilidades de exploración en la creación de los NNJ.
El segundo de 11 a 15 años tiene como líneas de acción:
- Enfoque de género y violencia de género, a trabajarse a través de la dramatización e imagen para llamar la atención sobre el cómo nos comportamos y qué reflejamos con nuestros actos, cómo identificar y entender las diferentes expresiones de violencia, y cómo planteamos un llamado de atención a la comunidad donde vivimos.
- Uso de tecnologías y medios digitales para la comunicación efectiva de mensajes, conceptos, conflictos y reflexiones que lleven a los NNJ a poder socializar los temas que sean pertinentes para ellos, buscando mostrar su opinión y entregándoles herramientas de comunicación digital se busca generar conciencia sobre el buen uso de los medios digitales.
- Integración de las artes musicales con la tecnologías y las ciencias, pudiendo generar creaciones musicales con aplicaciones, materiales, circuitos, sintetizadores, y otras herramientas que permitan la exploración e investigación musical para la expresión colectiva.
El tercer grupo de 16 a 19 años tiene como ejes:
- Enfoque y violencia de género a través de la performance, generando un proceso de reflexión y creación grupal que lleve a la muestra escénica en espacio público, de manera de comunicar de manera directa y efectiva los planteamientos o necesidades que los NNJ puedan plantear en las jornadas de reflexión, que buscan analizar el contexto social y cultural actual, buscando mejorar las relaciones humanas, haciendo un llamado de atención a través de la expresión artística en espacios urbanos que permitan la exhibición artística callejera contemporánea.
- El uso de la tecnología y la comunicación social, se plantea como una herramienta o canal de comunicación efectiva de mensajes de impacto social, utilizando las plataformas digitales de buena manera para generar redes de pensamiento o análisis que vayan conformando una pequeña comunidad interesada en comunicar mensajes a comunidades digitales.
- Integración de las artes, música, tecnología e identidad local, busca rescatar la esencia de la cultura local y expresarla a través de la investigación y creación musical en integración con otras disciplinas que enriquezcan la expresión integral, siendo el mensaje o el contenido, el principal hilo conductor de la experiencia que intenta encontrar nuevas formas de expresión utilizando las redes digitales para entregar un mensaje.
Estos ejes componen las estrategias de acción para cada rango etéreo buscando generar un enfoque integrador de disciplinas, entendiendo las ciencias como herramienta metodológica transversal, instalando al comienzo de la co-creación en cada sesión la idea de escucha investigativa que pretende explorar y definir los temas y conceptos con los que se establece la base de trabajo, donde el facilitador debe entregar herramientas claras de planificación en la búsqueda de conceptos colectivos con los que se trabajará en cada laboratorio. De esta manera se instala la posibilidad de ir internando de manera habitual el generar metodologías de investigación y creación colectiva, pudiendo integrar las ciencias de manera transversal en cada laboratorio.
Credits:
Cecrea