¿Cómo fue la experiencia de niños, niñas y jóvenes (NNJ) en los laboratorios del verano 2017 en Cecrea Vallenar? ¿Cómo creen ellos/as que podría mejorar el ciclo programático? Con estas preguntas en mente, Cecrea Vallenar realizó su primera Escucha Creativa de 2017.
¿Qué es una Escucha Creativa? Es una metodología participativa, lúdica y de consulta que busca recopilar información para la constante retroalimentación del programa, y la toma de decisiones en cada Cecrea.
Se realiza al finalizar o durante cada ciclo programático. Para ello se invita a niños, niñas y jóvenes (NNJ) que han participado de los laboratorios en Cecrea para conocer su experiencia, además de proyectar la programación y la vida del Centro. La Escucha Creativa pone de manifiesto el derecho de los NNJ a participar y ser escuchados.
En Vallenar, la primera Escucha Creativa de 2017 se realizó el viernes 5 de mayo en las dependencias de la ONG Filadelfia, ubicada en las afueras de la ciudad. Fue gestionada y coordinada por el Consejo de la Cultura de la región de Atacama y el Grupo CMD.
¿Cuál fue el propósito de esta primera Escucha? El propósito fue evaluar las actividades (laboratorios) realizados en el verano 2017, entre los que se destacan: "cuenta cuentos", "pequeños astronautas", "materiales sustentables", y "circo" realizados en la ciudad de Vallenar. Contó con 3 facilitadores y 3 observadores.
Para ello se les preguntó a través de diversos juegos y actividades: ¿Qué fue lo que más/menos les gustó de los laboratorios?, ¿qué aprendieron?, ¿tienen alguna idea o sugerencias que podría ayudar a Cecrea a mejorar sus futuras actividades?, ¿ qué les gustaría hacer a futuro?
Participaron 35 niños, niñas y jóvenes, de 6 a 19 años.
¿QUÉ HICIMOS?
Momento 1: la recepción
Para iniciar la jornada, conocernos y generar confianza entre los participantes, hicimos un gran círculo donde jugamos "Diga lo que le gusta", y "La pelota veloz".
A mí me gusta el helado de chocolate.
A mí me gusta jugar a la pelota.
Momento 2: Evaluemos el ciclo programático
¿Qué hicimos? Nos dividimos en tres grupos y los invitamos a observar y reconocer fotos y recuerdos para sensibilizar y revivir los momentos de los laboratorios en que participaron. Luego, utilizaron estos objetos para construir un "collage" que estaba dividido en 3 secciones: "lo que más nos gustó", "lo que hicimos y aprendimos" y "lo que se puede mejorar", dejando la decoración en sus manos (con emoticones, colores, figuras, recortes, entre otros).
Estas actividades (laboratorios) eran para niños más pequeños, no para mí que ya soy un "chico grande".
Me gusta esta foto porque todos se veían tan libres y felices. Refleja la parte interior de lo que fue el taller.
Los participantes se mostraron alegres recordando lo que habían realizado y cómo lo habían pasado.
Aprendí a andar en zancos, a improvisar, por eso elegí ésta foto del laboratorio.
Momento 3: Profundicemos en la evaluación
¿Qué hicimos? Para comenzar, los jóvenes nos tenían una sorpresa y sorprendieron a todos con su desplante y sobretodo, su música.
Luego, se realizó por grupos el juego "quién, no?" donde el facilitador contó una historia y todos se levantaban cuando decía la palabra "quién" y se sentaban cuando decía "no".
Luego, divididos en grupos y a través de la actividad "caritas mágicas" se les preguntó ¿cómo lo pasas en las actividades del Cecrea?, ¿qué te parecieron las actividades?, ¿cómo se llevaron con los facilitadores?, ¿cómo te sentiste?, entre otras.
No me gustó mucho la actividad de batucada porque no pude tocar tambores que son de piel.
Consejo: Compartamos lo que hicimos
¿Qué hicimos? En la cancha se agrupó a los participantes, quienes a través del juego "Las quemaditas", compartieron su experiencia en la jornada. Algunas de las preguntas que surgieron fueron: ¿Qué te gustó de la actividad?, ¿en qué podemos mejorar?, entre otras.
Hoy me divertí, aunque pensé que venía a jugar a la pelota
Lo positivo
¿Cómo analizamos? El análisis está segmentado por (1) el aprendizaje de los participantes y (2) el servicio entregado por los facilitadores, para niños, niñas y jóvenes.
La experiencia fue buena. Conocimos a los chiquillos y el espacio permitió darnos cariñitos (...), igual bacan porque acá en Vallenar, estas cosas se hacen poco.
Hicimos una casa de barro para el perro. Estaba hecha de barro y madera. Fue bonita.
Conclusiones
Sobre el ciclo de laboratorios en que participaron:
- Los niños, niñas y jóvenes agradecieron la oportunidad y valoraron positivamente la iniciativa. En su mayoría destacaron la posibilidad de compartir con otros compañeros/as (formar lazos afectivos), sentirse escuchados, aprender jugando, entretenerse y participar en actividades que están fuera del marco normativo de la escuela.
Sobre ideas para la programación
- Los jóvenes desean que las actividades duren más en el tiempo y quieren seguir desarrollando lo aprendido en su tiempo libre para difundirlo a la comunidad.
- Frente a lo anterior, el Consejo de niños, niñas y jóvenes de Cecrea Vallenar podría ser una instancia para el desarrollo de proyectos que surjan gracias a los aprendizajes de los laboratorios. Asimismo, en esta instancia se pueden diseñar estrategias para acercar a Cecrea a la comunidad y así mejorar la difusión, tema que fue destacado por los participantes como asunto a mejorar.
- Una de las tareas pendientes de los laboratorios es que los facilitadores cuenten con más materiales para todos/as, para que así no hayan problemas de convivencia a la hora de utilizarlos. Además, es importante que tengan principal atención por la seguridad (caídas en zancos).
- Surge como desafío también ampliar la variedad de los laboratorios, respondiendo a los intereses de los niños, niñas y jóvenes, y a su vez promoviendo que las iniciativas consideren un objetivo de transformación social.
- Es necesario revisar el espacio donde se están realizando las actividades de Cecrea. Tal como se afirma que el lugar era espacioso, para otros participantes fue incómodo. No se explicitó la causa de la incomodidad.
Sobre la convivencia en Cecrea
- Se destaca la buena percepción de los participantes hacia los facilitadores, reconociéndolos incluso como amigos, afectivos y empáticos.
- Es necesario revisar y poner atención en la convivencia en los laboratorios. Algunos niños y niñas manifestaron que sintieron que hubo burlas por parte de compañeros/as, y que no todos/as tenían las mismas oportunidades para hablar. Para ello podrían diseñarse colectivamente acuerdos de convivencia al inicio de un laboratorio, e ir recordándolos y actualizándolos en cada sesión.
- Es importante resguardar el derecho a la información de los niños, niñas y jóvenes, condición necesaria para la efectividad de los procesos participativos. En ese sentido, se destaca la opinión "hoy me divertí aunque pensé que venía a jugar a la pelota", como una señal de la necesidad de reforzar en la invitación y en la misma jornada el para qué de la Escucha Creativa. Asimismo, es importante reforzar cuáles son los objetivos del programa -creatividad, con enfoque de derechos, para el bienestar social- para que los participantes sepan qué y para qué opinar.