*Será reconstruida. Rescatan la corona de espinas de Jesús y otros artículos religiosos
*Su construcción inició en el siglo XII. Fue Inmortalizado por "El jorobado de Notre Dame"
* Los investigadores privilegian la pista incendio accidental. Descartan atentdo terrorista
*Con la caída de la Aguja desaparece gran parte la Ciudad Luz. Paris esta desfigurada
PARIS, Francia, 15 de abril de 2019.- La emblemática catedral Notre Dame de París, el monumento histórico más visitado de Europa ardió en llamas este lunes Santo. Cerca de 500 bomberos salvaron su estructura, pero el incendio derribó la famosa aguja de la iglesia católica y redujo a cenizas buena parte del tejado, manteniendo al mundo en ascuas durante horas. "La reconstruiremos” prometió el presidente Emmanuel Macron, al celebrar que se rescataron varias reliquias, como la Corona de Espinas de Jesús, la Túnica de San Luis, una escultura de Miguel Angeló y la cruz principal del templo que no perdió su color oro pese al fuego y al humo.
"Se ha evitado lo peor, aunque todavía no hemos ganado la batalla totalmente", añadió el mandatario francés, al agradecer a los bomberos haber salvado las dos torres y la fachada del monumento.
"Podemos considerar que la estructura está a salvo y preservada en su globalidad", informó el comandante de la brigada de bomberos de París, Jean-Claude Gallet.
Era la noticia que toda la ciudad esperaba con el corazón en un puño tras ver las impresionantes imágenes de las llamas devorando el edificio que recorrieron el mundo a través de las televisoras y el Internet.
Se desconoce el origen del fuego, que se declaró alrededor de las 18H50 (16H50 GMT) en la parte superior de la catedral y se propagó rápidamente al tejado.
Sin embargo, se descartó un atentado terrorista.
El fuego quemó el techo de madera de más de 100 metros de longitud, conocido como "el bosque" por el gran número de vigas que hubo que utilizar para instalarlo.
Los bomberos indicaron que el incendio está "potencialmente ligado" a las obras y la fiscalía abrió una investigación judicial por "destrucción involuntaria". Los investigadores privilegian la pista de un incendio accidental.
La enorme nube de humo visible a kilómetros de distancia envolvió el monumento, en el inicio de la Semana Santa.
En poco más de una hora el fuego echó abajo la aguja de 93 metros de alto, uno de los símbolos de París, provocando un grito de horror entre la muchedumbre agolpada en los puentes del Sena y en las calles adyacentes.
Con su caída desaparece una parte de la historia de la Ciudad Luz. "París está desfigurada. La ciudad nunca volverá a ser como antes", lamentaba Philippe, un francés de unos 30 años.
La corona de espinas y la túnica de San Luis, dos de las reliquias más importante, están a buen resguardo, afirmó monseñor Patrick Chauvet, el rector de la catedral.
Restaurar el edificio llevará "años de obras", estimó el nuevo presidente la Conferencia Episcopal de Francia, Eric de Moulins-Beaufort.
Una parte de la isla de la Cité, el barrio donde está ubicada la catedral fue evacuada.
Notre Dame acompañó la historia de París desde la Edad Media. Sus campanas anunciaron el 24 de agosto de 1944 la liberación del yugo de los nazis y en ella se celebró 26 años más tarde el funeral del presidente Charles de Gaulle.
Entre 12 y 14 millones de personas, es decir una media de 35.000 por día, visitan cada año esta obra maestra de la arquitectura gótica, situada en la île de la Cité, en el corazón del París medieval.
Su construcción, iniciada a mediados del siglo XII, se prolongó durante unos 200 años.
Durante la Revolución Francesa, la catedral sufrió numerosos actos vandálicos, en los que se desarmó su aguja, se saqueó su tesoro y las grandes estatuas del pórtico resultaron destruidas.
Los revolucionarios incluso organizaron un "culto de la razón" el 10 de noviembre de 1793, poco antes que el culto católico fuera prohibido en París. La catedral acabó transformada en almacén.
Devuelta al culto en 1802, se convertirá en el personaje central de una novela de Víctor Hugo publicada en 1831. Poco después, Eugène Viollet-le-Duc estará a cargo de su restauración. Trabajará hasta su muerte en estas inmensas obras durante dos décadas.
Notre Dame consiguió escapar indemne a las dos guerras mundiales.
Sus campañas sonaron para anunciar, el 25 de agosto de 1944, la liberación de París.
Mucho más recientemente, las nueve campanas gigantes de la catedral fueron reemplazadas en 2013.
Su aguja, que cayó devorada por las llamas este lunes, estaba siendo renovada.
- 2.000 misas cada año -
En su interior fue celebrada la victoria de la Segunda Guerra Mundial, el inicio del proceso de rehabilitación de Juana de Arco, la boda de Enrique de Navarra, futuro Enrique IV, con Marguerita de Valois y la coronación de Napoleón I.
Recientemente, se llevaron a cabo entre sus muros las ceremonias fúnebres en honor de los jefes de Estado, como Raymond Poincaré y el general Charles De Gaulle, y de grandes personajes, como el poeta Paul Claudel o el Abad Pierre.
La catedral, que también es un santuario mariano con rango de basílica, sigue asegurando sus funciones como edificio religioso.
A diario celebraba cinco misas y siete los domingos. Con las fiestas y las celebraciones excepcionales, son más de 2.000 misas al año.
Notre Dame es también el punto de salida kilométrica de todas las carreteras nacionales que salen de París.
En estos últimos años, el edificio vivió a ritmo de las tragedias que golpearon el país.
Sus campanas redoblaron al día siguiente del asesinato de los periodistas y dibujantes del diario satírico Charlie Hebdo en enero de 2015.
Las más altas autoridades civiles y religiosas se congregaron bajo sus bóvedas en julio de 2016 para rendir homenaje al padre Jacques Hamel, degollado por dos yihadistas en su iglesia cerca de Rouen, en el norte.
En septiembre de 2016, cerca de este símbolo de la ciudad, fue hallado un coche cargado con botellas de gas. Un comando de tres mujeres militantes del grupo yihadista Estado Islámico, lo había dejado allí.
En junio de 2017, un yihadista actuando "por Siria" atacó a un policía con un martillo en la explanada delante de la catedral.
Informado de la catástrofe, el presidente Macron anuló el discurso previsto para anunciar medidas frente a la crisis de los "chalecos amarillos" y acudió al lugar del siniestro.
"Emoción de toda una nación. Pensamientos para todos los católicos y para todos los franceses. Como todos nuestros compatriotas estoy triste esta noche de que se queme esta parte de nosotros".
La catedral, con alrededor de 13 millones de visitantes al año, es el monumento histórico más frecuentado de Europa y ha sido inmortalizado por Victor Hugo en "El jorobado de Notre Dame"
Victor Hugo, indignado por el estado "inadmisible" del monumento, comenzó en 1831 a escribir esta obra, quejándose de su deterioro.
No fue el único escritor conmovido por su belleza. El poeta romántico Gérard de Nerval, escribió un año después: "Aunque Nuestra Señora es muy vieja, es posible que algún día sepulte a ese mismo París que ella ha visto nacer".
Con el incendio que desfiguró Notre Dame de París, los católicos de Francia lloran una de sus más bellas catedrales, a la vez un "símbolo vivo" de su fe, un lugar de "reconciliación" con otras culturas y con los no creyentes, y una parte de la historia de Francia.
El obispo de París, monseñor Aupetit, quien lamentó ver "la estructura, el techado y la flecha [...] consumidos", pidió que repicaran las campanas de las iglesias.
La noche del lunes, algunos de los parisinos que observaban atónitos el edificio en llamas se arrodillaron en la acera para rezar y recitar el avemaría.
En diferentes iglesias se celebraron oficios, como en la basílica del Sagrado Corazón de Paris.
Más allá de su dimensión espiritual, Notre Dame tiene "una dimensión simbólica muy fuerte, histórica y cultural, que afecta a todos los franceses", destacó Stanislas Lalanne, obispo de Pontoise, dentro de la región parisina.
- Lugar único -
Notre Dame de París "es nuestra historia, nuestra literatura, nuestro imaginario, el lugar en el que vivimos todos nuestros grandes momentos", declaró el presidente francés, Emmanuel Macron, quien acudió al lugar. "Reconstruiremos Notre Dame", aseguró.
"Esto supera de lejos a los católicos, Notre Dame es la historia de Francia", resumió para la AFP Jean-Louis Schlegel, sociólogo de las religiones. "Ahí, el general De Gaulle celebró la Liberación de París y Napoleón se coronó. Hubo misas por la muerte de los presidentes Charles de Gaulle, Georges Pompidou e incluso François Mitterrand", recordó.
"Todos los jefes de Estado que vienen a París por primera vez visitan la catedral", el monumento más visitado de Europa, señaló.
"En los últimos años, para los acontecimientos trágicos, como los atentados o las grandes tragedias, hubo misas en Notre Dame, que representa un lugar de reconciliación para los católicos, pero también para los otros cultos y los no creyentes", añadió. "Creyentes y no creyentes pueden encontrarse ahí en los momentos importantes de la historia de nuestro país", insistió la Conferencia Episcopal.
"Es el símbolo de la historia de Francia en su excelencia", consideró.
"En los últimos años, para los acontecimientos trágicos, como los atentados o las grandes tragedias, hubo misas en Notre Dame, que representa un lugar de reconciliación para los católicos, pero también para los otros cultos y los no creyentes", añadió. "Creyentes y no creyentes pueden encontrarse ahí en los momentos importantes de la historia de nuestro país", insistió la Conferencia Episcopal.
Credits:
Elvia Andrade Barajas, AFP, AP y Sergio Romero