Justo al inicio del curso comentaba de lo que he vivido en cuanto a los procesos educativos; el mundo era distinto al que hoy vivimos, la tecnología nos ha hecho cambiar hábitos, transformado las habilidades, cambiado muchas actitudes y los valores se jerarquizan de forma distinta. Como se menciona en el vídeo Soñar el futuro, "…el mundo ha cambiado mucho y rápido, por desgracia uno de los sectores donde las cosas se mueven más lentamente es el de la educación…la educación debe reinventarse". El dilema de ofrecer alternativas educativas para todos los seres humanos, sigue presente; con todos los avances tecnológicos aún no hay posibilidad de acceso a la educación básica y mucho menos niveles más avanzadas.
La escuela debe adaptarse a los estudiantes, no los estudiantes a la escuela…el ejemplo de “el agujero en la pared” del Dr. Sugata Mitra se muestra que la preocupación en todas estas innovaciones y cambios, no está precisamente en el estudiante; los docentes y su capacidad de creación, sensibilidad al cambio y posibilidad de usar el pensamiento divergente aplicado a su práctica, es la parte toral del asunto.
He vivido y acompañado grupos de educadores de diversas latitudes en nuestros Méxicos, Colombia, España y Estados Unidos, en ellos he visto resistencia por los modelos vanguardistas; pero, al mismo tiempo, hay muchos docentes que se entusiasman y viven esa transformación con sus alumnos -sin importar su edad cronológica-. De manera personal de niña pude vivir en una primaria “experimental”, cuando recuerdo lo feliz que fui y veo desde la perspectiva de mis actuales años, mis maestros eran realmente innovadores y nos daban independencia para ser autónomos en la selección de contenidos, materiales y prácticas; curioso, fue la primaria y una agradable institución pública en la hoy Ciudad de México; los profesores tenían que estar muy pendientes de nosotros, preparados para las preguntas que nos surgieran y apoyarnos en el avance, lo cual requiere indagar e investigar ampliamente los temas.
La creación de los robots como personalizadores y apoyo al aprendizaje, me parece fascinante; en el ejemplo de los niños, que muestra el video, es una herramienta muy atractiva; sin embargo, lo que más me llama la atención, es lo que pueden despertar en curiosidad, preguntas, el ánimo de colaboración y participación, todo lo que fomenta ese diseño en la introducción exacta del robot en el momento preciso; ese creo es uno de los papeles más importantes del docente: acomodar, adaptar, mejorar lo que tiene para generar espacios donde el estudiante pueda “…sacar lo mejor de sí…”, ellos, los facilitadores-profesores hacen que los niños “…sientan la emoción…que quieren inspirar”, como mencionan en el vídeo.
Efectivamente la educación será más tecnológica, más digital y los robots serán necesarios en el aprendizaje, en la educación básica, creando esos -micromundos- con lo que pueden vivir las experiencias de manera segura y orientada; “la escuela en la nube” es un ejemplo de muchos apoyos que pueden encontrarse, así como COURSERA, los MOOC´s y otros recursos.
Ser un docente el día de hoy es una tarea que requiere habilidades y “competencias” distintas… estar frente a frente ya no es necesario, el lápiz y papel es sustituido por actividades en donde el uso de la tecnología es fundamental; la manera de promover el aprendizaje tiene que ser sumamente inteligente. La participación en la cultura digital depende de la capacidad de interactuar en grupos virtuales, lo cual es impensable sin un proceso estructurado en la dinámica de las clases; pensar en el conocimiento, la indagación y la discriminación de la información de una manera multidisciplinaria, colaborativa y que promueva competencias; procurar un ambiente abierto, que estimule la creatividad y el trabajo de proyectos; plantear experiencias reales, aplicadas a la cotidianidad y con alternativas para resolver problemas.
Así como se está aplicando la ergonomía en espacios que los arquitectos han trabajado para favorecer las condiciones donde ocurran los distintos procesos de aprendizaje: iluminación, movilidad, zonas de relajación, espacios abiertos, etc… “…el diseño no como solución, sino como herramienta para el desarrollo...”, dando posibilidades al reinventar espacios físicos y facilitar el uso de la tecnología; es menester trabajar con la práctica docente; en los niveles avanzados, técnicos o universitarios el fundamento de casos y proyectos aplicados a la realidad de las comunidades donde se encuentren los estudiantes, será posible en la medida que las organizaciones empresariales, sociales y gubernamentales abran sus puertas a quienes posibilitarán, en su aprendizaje, las mejoras, los avances y el desempeño ligado a la realidad laboral.
Algo que me parece ser inmanente, una constante en nuestra labor como docentes, es nuestro sentido de humanidad, de cercanía, aun con la distancia y a través de la constante interacción. En el fondo, eso parece mantenerse, los estudiantes siguen tratando de encontrar en nuestro quehacer a una persona que sea capaz de escucharles, entenderles, confrontarles y aconsejarles.
Tal vez algo humano…que no sea sustituido, sino favorecido y potenciado por el apoyo de los robots y la tecnología.
Agradezco su atención y comentarios.
