Castillo fuerte es nuestro Dios, defensa y buen escudo;
Con su poder nos librará en este trance agudo.
Con furia y con afán Satán acosará;
Por armas deja ver su astucia y gran poder;
Cual él no hay en la tierra.
Nuestro valor es nada aquí, con él todo es perdido;
Más por nosotros luchará, De Dios, el Escogido.
Es nuestro Rey Jesús, el que venció en la cruz, Señor y Salvador, y siendo Él sólo Dios.
Él triunfa en la batalla.
Aunque estén demonios mil prontos a devorarnos,
No temeremos, porque Dios sabrá cómo ampararnos.
Si muestra su vigor Satán y su furor;
dañarnos no podrá pues condenado está…
Por la palabra Santa.
Esa Palabra del Señor, que el mundo no apetece;
por el Espíritu De Dios muy firme permanece.
Nos pueden despojar de bienes y hogar,
El cuerpo destruir, mas siempre ha de existir…
de Dios el Reino Eterno.