BIOGRAFÍA de Juan Marsé, novelista del Grupo de Barcelona
Breve biografía de Juan Marse. En Instituto Cervantes
"Juan Marsé: una vida que se hizo novela". En ABC Cultura- Libros
Imprescindibles: Érase una vez Juan Marsé. En Youtube
"Una novela muy innovadora, provocadora, incomprendida en su época, "una explosión sarcástica" (Mario Vargas Llosa)
Publicación: 1966 (se llevó al cine en 1983). Es la tercera novela de Marsé.
Desde el punto de vista temático, es la primera de su novelística que relaciona el mundo de la clase alta con el de la clase baja. Se ubica en el ciclo temático de la burguesía catalana y la inmgración durante el franquismo
Desde el punto de vista estilístico, es la primera en que el escritor muestra un estilo propio, superando el realismo social de los años 50 y 60.
TEMA
Frustración de los personajes que persiguen un ideal, descubriendo la complejidad de lo real y fracasando por ello.
Manolo es víctima de sus ensoñaciones. Cree que podrá salir de la pobreza casándose con una hermosa burguesa. El desengaño le llega de manera brusca cuando lo detiene la policía. Teresa también se engaña pues todo acaba siendo un producto de su propia fantasía revolucionaria. Sin embargo, ella se consuela rápidamente y Manolo paga su error en la cárcel, aunque acepta su derrota con resignación y sin deseos de venganza.
Mensaje pesimista: La división entre clases sociales es irreversible. No se puede cambiar ni con la revolución ni con el amor entre desiguales.
“Cuando era joven y del partido comunista en París, tenía las ilusiones a flor de piel, aunque no tanto como para esperar la huelga general de inmediato. Mis ilusiones eran a más largo plazo, pero me desengañé muy pronto. Con Últimas tardes... quise ironizar con todo esto, sacarle la punta a tanta ensoñación. Mis propias relaciones emotivas con el partido, en las que solían confundirse la realidad con el deseo – lo mismo que Teresa en su relación con el Pijoaparte –, me propusieron un ajuste de cuentas conmigo mismo. En ambos casos estas relaciones idílicas se basan en un equívoco, un espejismo en el que se confunden apariencia y realidad. Los coqueteos de Teresa con Pijoaparte, con su ideal de futuro, son mis coqueteos con el partido.” (Marsé)
El objetivo de Marsé es contar una historia que pueda entretener al lector. La historia del individuo a la búsqueda de un ideal, la critica de la burguesía y el estudiantado y la desmitificación de ciertas situaciones.
Presenta dos mundos sociales en conflicto que no son tanto económicos sino ideológicos y políticos. Teresa Serrat abandona a Manolo antes de ser encarcelado porque ya no cree en él, y es posible que éste hubiera comenzado a dudar de las posibilidades de la chica de ayudarlo a mejorar, por eso el conflicto del mundo de Teresa con el de Manolo es el de las ilusiones con las utopías, es el enfrentamiento del individuo con la realidad.
TRASFONDO HISTÓRICO Y SOCIAL
La novela se sitúa entre los años 1956-57 en Barcelona. Este periodo se acerca más a la posguerra que al desarrollismo de los años 60.
- Hasta 1952 estuvieron racionados el pan y los alimentos básicos.
- En 1956 estalla una crisis económica. En 1957 hay una devaluación de la peseta.
- Hasta 1959 no se aprueba el Plan de Estabilización Económica (conjunto de medidas económicas cuyo objetivo es liberalizar la economía española. Supuso la ruptura con la política de autarquía del franquismo y posibilitó el inicio de una época de crecimiento económico en el país durante los años sesenta). Sin embargo, la vida cotidiana de la Barcelona que aparece en Últimas tardes con Teresa parece más próxima al ambiente consumista de los años 60 (turismo masivo, carreteras llenas de coches…)
Hay escasas referencias a la difícil situación de las clases populares en 1956 y no aparecen alusiones al régimen franquista
DESAJUSTES TEMPORALES
La novela tiene indicaciones temporales muy precisas, pero la ambientación general corresponde más a los años en que fue escrita (1964) que a 1956-1957. Algunos ejemplos:
- El modelo Renault Floride de Teresa se comercializó en 1959, apadrinado por Brigitte Bardot.
- El Felipe: nombre coloquial del Frente de Liberación Popular, una organización antifranquista de ideología socialista cristiana. Fue fundada en 1958 en Madrid. En Cataluña, su equivalente era el FOC (Front Obrer de Catalunya), surgido en 1961-962.
- La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, que usaba motos Sanglas, fue creada en 1959.
- El Seat 600 se empezó a fabricar en 1957.
- El transistor fue inventado en 1942. En España se introdujo a finales de los 50.
- El bar musical Jamboree fue inaugurado en 1959.
- Alusión a la preparación de una huelga de tranvías. En efecto, los comunistas del PSUC trataron de repetir el éxito de la huelga de los tranvías en 1951 cuando los barceloneses protestaron por la subida del precio del billete. Pero este segundo intento de huelga ocurrió en enero de 1957, mientras que en la novela se situaría después del verano de ese año.
ESTRUCTURA NARRATIVA
Formalmente, la novela se divide en tres partes, cada una de ellas subdivida en secciones, precedidas de una cita literaria. Antes, Marsé presenta a la pareja protagonista dando un paseo una noche de septiembre en medio de un lecho de confetti y serpentinas en lo que será el último instante que pasan juntos.
En cuanto al contenido, se puede dividir también en tres partes:
1ª parte: PLANTEAMIENTO (Aspiración de ascenso social del protagonista: relación de Pijoaparte y Maruja. Interés por Teresa)- Secuencia inicial + cap. 1-5. De junio' 1956 a mayo de 1957.
2ª parte: NUDO (El falso ascenso: Maruja en el hospital. Relación de Pijoaparte y Teresa)- Cap. 6- 15. De junio a septiembre de 1957.
3ª parte: DESENLACE (Caída: deterioro de la relación. Retorno al punto de partida)- Cap. 22. Verano de 1959.
ESPACIOS URBANOS, AMBIENTES SOCIALES
Los espacios interiores y exteriores se describen a menudo de acuerdo con el estado de ánimo del personaje, un buen ejemplo es la primera descripción del Carmel, que aunque es pobre en detalles consigue a base de ciertas impresiones -"la brisa del mar no puede llegar hasta aquí"- transmite una sensación de tristeza acorde al estado de ánimo del personaje, que el narrador expresa: "Se sentía muy solo y triste". Este tipo de descripción impresionista es frecuente como forma de definición del espacio, es el caso de la primera impresión de Manolo cuando ve la torre de los· Serrat, "aquellos grandes espacios iluminados, superficies lisas y muebles que no estorbaban ni parecían dispuestos a envejecer") y también de la descripción de la casa de Cardenal cuyo valor no está en los detalles sino en la impresión que producen a Manolo: "una fría sensación de provisionalidad, tenía el aspecto de la mudanza que precede al vacío".
Carmel y Sant Gervasi
El Parque Güell separa lo que en el año 1956 eran zonas tan distintas como El Carmel y Sant Gervasi, zonas que se corresponden respectivamente con el lugar de residencia habitual de Pijoaparte y Teresa. En ninguno de los dos casos el narrador tiene interés en ofrecer detalles de ambos espacios, más bien se limita a presentar algunos rasgos distintivos de cada uno de estos espacios-tipo -el de la burguesía consolidada y el de la emigración suburbial- el lector pueda cubrir con su imaginación los datos que no se ofrecen. El Carmel es un suburbio que en el año 1956 es el espacio de la emigración, del "txarnego", y esa misma denominación que se aplica al que no es "catalán viejo" es la que define al espacio y sus habitantes. Frente a este espacio se encuentra el de la burguesía, el de las villas con jardín de Sant Gervasi y el de los pueblos de la costa barcelonesa (ambos componen el ambiente de Teresa y son también el espacio del deseo de Manolo).
Cada personaje define el espacio dentro de la concepción que es propia de su nivel social. El mejor ejemplo de ello está en la concepción que los personajes poseen sobre el Carmel. No es el mismo punto de vista el de Maruja (consciente de la realidad) que el de la madre de Teresa (postura clasista acorde a su situación social):
"El Monte Carmelo era algo así corno el Congo, un país remoto e infrahumano, con sus leyes propias distintas"
En Últimas tardes... la novedad está en la presentación de dos ambientes en contraste, manteniendo los rasgos del espacio burgués e introduciendo el mundo de la delincuencia representado por el Carmel y sus calles adyacentes, de tal modo que se establece una identidad entre espacios fisicos y espacios sociales. La distancia física no es excesiva entre estos dos barrios, pero en la práctica se revela infranqueable, como puede verse en el episodio en el que los muchachos del Carmel rodean el coche de Teresa.
"Charnegos, pijas y chonis: un paseo por el Carmelo de 'Últimas tardes con Teresa'". En El Confidencial (5 de abril de 2016)
PERSONAJES
Aparecen dos grupos de personajes de distinta clase social: en el primero, el de la burguesía, encontramos al matrimonio Serrat -Oriol y Marta- con su hija Teresa, el matrimonio Bon -Alberto y Mari Carmen-, y el grupo de estudiantes -María José Roviralta, Leonor Fontalba, María Eulalia Bertrán, Guillermo Soto, Ricardo Borrel y Jaime Sangenís- liderados por Luis Trias de .Giralt. En el segundo grupo están Maruja y sus padres, el hermano de Manolo y su esposa, Cardenal y su sobrina Hortensia, y todos aquellos que tienen relación directa o indirecta con el mundo delictivo del protagonista : Bernardo, Paco, Bugui, las hermanas Sisters, Rosa y Lola.
Casi todos ellos guardan relación directa con la trama y viven el espacio y tiempo de la narración, pero hay otros que no están presentes y se mencionan como parte del pasado de los personajes -los Moreau, el Marqués de Salvatierra-, también hay personas reales mencionados vinculados al mundo literario -Sartre, Simone de Beauvoir- y algunos personajes que adquirirán un papel relevante en otras novelas, es el caso de Guillenno Soto y José Roviralta o Luis Polo.
TERESA: No es criticada con la misma virulencia que Luis o al conjunto de “señoritos de mierda”. Se trata de una chica impulsiva, que se deja llevar por los que la rodean, sin darse cuenta de las consecuencias de sus actos.
“Quería ser también comprensivo y piadoso, porque Teresa va movida por ese equívoco, pero va con buena fe, es generosa” (Marsé)
Teresa quiere ser lo que no puede o no debe ser: una líder estudiantil. Con esta idea pasa la mayor parte de los días en compañía de Luis Trías de Giralt, un joven universitario que se sospecha "conectado" con las más altas instancias del Partido Comunista, hasta que a partir de la enfermedad y muerte de Maruja conoce a Manolo y enseguida ella comprende que el mito perseguido está ahora a su alcance, sin embargo, hay una considerable distancia entre sus aparentes ilusiones y sus verdaderos deseos, que tienen mucho que ver con la consolidación de una vida sexual satisfactoria, problema que no ha podido resolver con su compañero Luis Trías y que la decide por completo a profundizar sus relaciones con Manolo.
MANOLO "Pijoaparte": No es considerado un obrero -no se le conoce ocupación legal- y sí un delincuente de poca monta. Marsé tiene como referente al joven de provincias de la novela francesa del siglo XIX y, además, es una proyección autobiográfica.
Tiene ambiciones, pero es un sentimental, no un frío calculador. Sus aspiraciones son ensoñaciones, no proyectos bien planificados y ejecutados con astucia y eficiencia. El autor lo define como “un pobre chaval”, “un ingenuo”, “un personaje patético”. Es un perdedor nato, arquetipo que abunda en las novelas de Marsé.
“El Pijoaparte, tan exacto en su naturalismo, tan personaje del miserable mundo real, es también un héroe clásico de las novelas, uno de esos jóvenes alucinados por la amplitud de sus deseos y por los designios de su propia voluntad que aparecen siempre en Stendhal, en Balzac, en Maupassant, en Flaubert [...]” (A. Muñoz Molina)
“En aquella época, a mí me hubiera gustado tener una experiencia amorosa con una muchacha de la burguesía catalana, rubia, de ojos azules.” (Marsé)
La historia de Manolo es la historia de una búsqueda, la de una mujer que pueda ser el compendio de belleza y nivel social que apreció en la hija de los Moureau. Cuando en la primera aventura de la novela y bajo el nombre de Ricardo de Salvatierra irrumpe en la fiesta y ve a dos chicas sentadas al borde de la piscina se fija en la rubia porque responde exactamente a sus expectativas, ha encontrado su mito particular, y el resto de la novela será la historia de la conquista de este mito. Así, el narrador destaca en Teresa su belleza y luminosidad, aspecto éste que no debe pasar desapercibido porque es el vinculo que la une a la chica de los Moureau, el mito de la infancia de Manolo.
"El Pijoaparte sería hoy un inmigrante del Magreb". En El País (4 de diciembre de 2005)
Relación entre Teresa y Manolo
En la segunda parte de la novela Teresa decide ir a buscar a Manolo al Carmelo, y en ese primer contacto que pone de manifiesto la gran distancia que existe entre mundos sociales contrapuestos:
El pobre Bernardo estaba sencillamente anonadado cuando se apartó para dejar paso a Manolo: se movió un rato en tomo al "Floride", a distancia, como un lobo viejo y achacoso alrededor del rebaño que ya no puede apresar. El Pijoaparte cerró mal la puerta (tal como temía), con una torpeza que, contrariamente a lo que creía, a ella le pareció encantadora.Teresa en su mundo político (...) en Manolo encuentra la personificación de su fantasía, y sabido es, por otra parte, que para el joven delincuente Teresa es la fantasía de la mujer.
Teresa, en su mundo político, encuentra la personificación de su fantasía en Manolo y para el joven delincuente Teresa es la fantasía de la mujer romántica y rica. Para mejorar su experiencia con el mito ambos personajes cambian: Manolo comienza a cuidar su vestuario, pide libros a Teresa..., y ella empieza a vestir con una elegancia agresiva, inquietante. Se cumple la inversión de papeles, la "sanchificación" y "quijotización" de los dos personajes que se sienten atraídos por los ambientes contrarios a los que hasta entonces frecuentaban. Una vez que la pareja ha adquirido pleno conocimiento del ambiente en que se mueve el otro comienzan las desilusiones que llega a su decepción definitiva al comprobar cómo Manolo no tiene que ver con la resistencia obrera.
Lo sabía, lo había sospechado siempre: el Monte Carmelo no era el Monte Carmelo, el hermano de Manolo no se dedicaba a la compraventa de coches, sino que era necánico, aquí no había ninguna conciencia obrera, Bernardo era un producto de su propia fantasía revolucionaria, y el mismo Manolo.
Teresa decide volver a su estatus primitivo y en un último capítulo sabemos que se ha casado con un primo y ha perdido felizmente su virginidad. Manolo, que se resiste en volver a su forma de vida anterior, roba una moto con la esperanza de verla por última vez y arreglar las cosas, pero en el trayecto la policía lo detiene y lo encarcela gracias a la denuncia presentada por Hortensia. En el momento de la detención los hechos se han consumado, el sueño de Teresa y el de Pijoaparte son imposibles. Sólo se concibe en relación a ella, únicamente tenemos breves menciones de su pasado, sus problemas con ella propician la consolidación del vinculo con Pijoaparte.
MARUJA: Es hija de campesinos pobres, que viene a la ciudad para servir como criada a los señores Serrat. Humilde, aparentemente simple, resignada, agradecida a Dios por la pequeña porción de felicidad que se le ofrecía, el afecto de Teresa y su aventura con Manolo. Para Manolo, Maruja presenta siempre un aire de desesperación que lo desorienta y le provoca sentimientos encontrados. Le hace sentir un cierto desprecio hacia ella en un principio y una repulsión hacia su necesidad de amor.
LUIS TRIAS: A pesar de ser un personaje secundario y estar subordinado a la acción de la pareja protagonista, es uno de los más interesantes que presenta la novel. El valor del personaje no es tanto representar a la juventud universitaria como completar la figura de Teresa.
Estudiante aventajado de económicas, nieto de piratas mediterráneos, hijo de un listísimo comerciante que hizo millones con la importación de trapos durante 10s primeros años cincuenta, era alto, guapo, pero de facciones deshonestas, fundamentalmente políticas, carnes rosadas, el pelo rizoso y débil, la mirada luminosa pero infirme: parecía un Capeto idiotizado con paperas (...) y tenía ese aire un poco perplejo de manso seminarista en vacaciones, con un leve balanceo de la cabeza a causa del vértigo teológico, del peso trascendental de las ideas o de una simple flojera del cuello, como si andara graciosamente desnucado.
La caracterización de Luis no depende sólo de la descripción que ofrece el narrador, sino también de sus actos que se definen por su relación con la pareja protagonista y especialmente con Teresa.
ORIOL SERRAT: Representa la burguesía consolidada y consecuente con su propio estatus.
Oriol Serrat era alto, recio, con el pelo blanco en las sienes y fino bigote canoso. El rostro largo y moreno, las interminables mejillas perdigueras y el mentón hennoso, algo intransigente o duro (...) guardaba todavia restos de una belleza viril que estuvo de moda en los años treinta, una especie de versión catalana y débil de Warner Baxter. Un aire incierto de alférez provisional flotaba veces en su rostro y le incluía por méritos estéticos en ese benemérito montón de pulcros y anónimos maduros, todos iguales; que se diría han querido eternizar su juvenil adhesión a la victoria con el fino, coqueteo, bien cuidado y curiosamente recortado bigote ibérico.
TIPO DE NARRADOR Y PERSPECTIVA
Se trata de un narrador omnisciente en tercera persona. Muy abundantes son los ejemplos que demuestran el refuerzo de la omnisciencia del narrador, por ejemplo, cuando Luis Trías abandona misteriosamente el bar Saínt Germain: "Pero volvamos a los hechos. Al salir del bar nadie sospechaba lo que podía ocurrir"-, dentro de su interés por controlar el relato y en más de una ocasión sitúa la historia bajo su óptica personal. Así lo hace en una de las referencias a Teresa, aconsejando al lector : "ved sino su especial manera de ladear la cabeza despeinada". También interrumpe los diálogos con sus consideraciones, se extiende en digresiones sobre los estudiantes, los turistas, contradice a los personajes -''No era verdad. Llevaba esperándole más de media hora"- y, en definitiva, ofrece claras muestras de omnisciencia total :
El murciano rectificó, se retrajo: tardaría un poco, esa noche, en comprender varias cosas: la primera, que aquella sonrisa de la muchacha no era tal sonrisa, sino un puro accidente, un particular efecto risueño de sus mejillas replegadas bajo los pómulos. Ya en otra ocasión, años atrás, había sufrido el mismo error con una extranjera triste y madura (...). Andando el tiempo había de conocer tantas sonrisas inalterables y permanentes como ésa que llegaría incluso a pensar que, lo mismo que el dinero, la inteligencia y el color sano de la piel. los ricos también heredan esa sonrisa perenne.
Además. encontramos en la novela otros procedimientos narrativos, empleados por Marsé en otras novelas:
- Estilo indirecto libre
El narrador desaparece para dejar paso a las palabras del personaje:
La rondaba la sombra deleitosa de la autocrítica: el cambio que empezaba a opcrarse en sus ideas le asustaba. Estaba enojada consigo misma, su conducta con Manolo le parecía ridícula, tontamente sublimada-admite que la personalidad política del chico dejó de importarte hace tiempo, reconócelo, pensaba ahora, tendida en la cama de su dormitorio pintado de azul sin poder dormir (su abdomen palpitante registraba un ritmo de guitarra), sudando una ginebra musical entre muñecas y discos y libros, frotando tiernamente su mejilla contra el hombro desnudo.
- Uso del paréntesis
El empleo del paréntesis es un recurso que Marsé había utilizado ya en su primera novela con intención de precisar ciertas informaciones de escaso interés. En Últimas tardes... sobran ejemplos de esta práctica -"casualmente operada de apendicitis (y con pleno éxito) por el propio doctor Saladich"; "mientras permanecía de pie mirando a Maruja (eran cuatro o cinco minutos)"; "en el pequeño espacio (cada vez más pequeño) que les separa por encima de la mesa".
- Modalidad epistolar
Se aprecia una evolución que se observa en la incorporación de las cartas al discurso del narrador, de modo que aparecen resumidas en una forma de modalidad epistolar que podemos apreciar en la carta que Pijoaparte recibe de Teresa, cuyas noticias conocemos al final como forma de sustitución de un monólogo (fundamental para la comprensión de la novela.
ESTILO NARRATIVO
Estrategias empleadas en la novela para distorsionar la temporalidad interna.
- Uso del Flash back: Por ejemplo, Manolo y los Moreau; episodio sexual entre Teresa y Luis
- Dos monólogos interiores de Maruja (el monólogo interior está presente por primera vez en esta obra). Hace resurgir a un personaje secundario como voz autorizada para explicar una situación desde la objetividad y la experiencia:
(...) Lo sé; una es ígnorante y de hombres entiende poco, pero lo poco que una sabe de ellos, en la cama y con ellos lo aprendió (...) y a mí no podía engañarme aquella noche en la verbena: solamente un pelagatos es capaz de confundir la riqueza con una simple cara bonita y besar de aquel modo tan urgente, como si quisiera sorber el mundo con la boca.
El primer monólogo de Maruja revela la impostura de Manolo, aclara la distancia entre lo que parece y lo que realmente es, y la criada es quien desde el primer momento lo comprende. En el segundo monólogo se centra en la formación de Manolo, en su historia hasta donde él ha querido o sabido contarle.
Alarde erudito. Predominio de clásicos franceses y españoles (San Mateo, San Juan de la Cruz, Shakespeare, Góngora, Espronceda, Rimbaud, Balzac, Hugo…). Autores contemporáneos (Salinas, el crítico Lionel Trilling, Neruda…) y amigos de Marsé (Gil de Biedma, Miquel Barceló)
Pastiche: Uso de textos no literarios (una información bursátil, una cita de una Historia del cine).
Uso de variedad de registros: culto, coloquial, vulgar, jerga juvenil progre. Establece divisiones entre los personajes.
- Por ejemplo, el habla del Pijoaparte es una de sus marcas de pertenencia a la clase baja, mucho más difícil de disimular que su aspecto externo, su ropa, etc. Emplea un tono violento cuando se dirige a miembros de su misma clase social y cultural, sobre todo a su amigo Bernardo -"¿Miedo? Me voy a cagar en tu padre, fíjate". Sin embargo, realiza “un evidente esfuerzo por conseguir un tono respetuoso” cuando está con Teresa y con los amigos de ella.
Las interpretaciones ideológicas han ido perdiendo vigencia, mientras la novela ha superado el paso del tiempo. Hoy puede ser leída desde ángulos más literarios que políticos, como “una triste historia romántica -del fracaso de unos sueños imposibles- que, con una ironía picaresca y el empleo de caducas formas de folletín decimonónico, se convierte en una tragedia contada en broma” (Manzini).
Hay algunos aspectos que permiten relacionar la novela con la literatura picaresca, el romanticismo y el folletín: 1) con la picaresca porque el personaje se dedica a diversos oficios y busca el ascenso social, 2) con el romanticismo en ese destino cruel que persigue al héroe y lo conduce por caminos bien distintos a los esperados sin que él lo sepa y 3) con el folletín en el tema de la desigualdad social que impide la consolidación de la pareja, la enfermedad y muerte de Maruja, el donjuanismo de Manolo, y la acusación de Hortensia.
Igualmente hay en esta novela una clara influencia de El Quijote en lo que tiene Pijoaparte de héroe defensor de la ficción en combate con la desagradable realidad, que se provee de una armadura -el traje que compraba todos los veranos- un caballo -motos robadas- y un escudero -Bernardo Sans- para buscar a su idealizada dama Teresa.
JUEGOS VERBALES EN LOS NOMBRES DE LOS PERSONAJES
El nombre de Pijoaparte tiene por objeto distinguirlo de los demás -sólo el narrador habla de él en éstos términos- lo que ha de entenderse dentro de un código particular entre el narrador y el personaje no exento de ironía. "Pijo" dentro del lenguaje coloquial significa persona que quiere aparentar o estar a la última.
Un caso similar es el de Cardenal, perista de Manolo y de su hermano y personaje misterioso que adopta el papel de consejero muy a pesar de Pijoaparte, en una función que es frecuente en ciertos personajes pertenecientes al universo de la degradada posguerra. El nombre de Cardenal es consecuente con esta misma función y apunta al sentido de la mesura, la prudencia y la educación de la que hace gala el personaje y que contrasta fuertemente con la de sus vecinos.
HIPÉRBOLE, PARODIA E IRONÍA
Marsé busca la sonrisa cómplice del lector mediante diversos procedimientos entre los que destacan la hipérbole, la parodia, y la ironía.
- La hipérbole
La hipérbole la emplea sobre todo en los juicios del narrador relacionados con ciertos personajes y situaciones. Busca ante todo un efecto degradatorio que cause comicidad y complicidad con el lector. Denominaciones como "joven del Sur", "altísimo señor" y "legendario caudillo" aplicadas respectivamente a Manolo, Cardenal y Luis Trías. La misma función degradatoria cumplen apreciaciones tales como que María Eulalia Bertrán "más que vestida iba amueblada", que el pecho de Rosa era para Manolo un "fatal reclamo amoroso",...
- Parodia
Tienen una intención paródica el empleo de textos diversos para encabezar los distintos capítulos de la novela, el primero de ellos es el poema "L' Albatros", incluido en Las flores del mal de Baudelaire, un texto que puede interpretarse como el sufrimiento de un ángel caído en medio de la mediocridad del vulgo que, incomprendido, no puede llevar el ritmo de vida de los demás. Pero todos podemos comprender a Pijoaparte, y del empleo de este texto en un contexto tan alejado deducimos la intención irónica del autor, que no acabaremos de entender hasta bien avanzada la novela.
- Ironía
Es posible percibir una cierta ironía en algunas apreciaciones y comentarios del narrador, por ejemplo, cuando se refiere a Teresa con expresiones como "la rubia politizada", "la universitaria moderna, de las del 56, dialéctica y objetiva", "la estudiante progresista"...
CASTELLANO, CATALÁN Y FRANCÉS
Se refleja el uso del castellano y del catalán en la época franquista por los inmigrantes y la burguesía.
- Pijoaparte, en su afán por ascender, por "ser un catalán como vosotros”, interioriza el catalán y lo convierte en el idioma de sus ambiciones, de su personalidad profunda, que brota espontáneamente en determinadas situaciones, como antes de dormirse o cuando está tenso: “Antes de dormirse definitivamente, se le oyó decir en un catalán insólito por el acento y la melancolía: Tots som uns fills de puta”; “...exclamó algo en un catalán que nadie comprendió”.
El francés representa la lengua de los intelectuales.
DESENLACE PREVISIBLE
No hay una intriga que atrape al lector con un posible desenlace inverosímil. Se descarta claramente el final feliz por el título o la escena inicial (“el perdidamente enamorado acompañante de la bella desconocida todavía no lo sabe, todavía el verano es un verde archipiélago”), entre otros indicios. Al no tener la novela una intriga abierta a diversos desenlaces, el autor puede centrarse en el devenir de los hechos. Al mostrar al lector desde el principio que el final feliz es imposible, puede dar a la obra un tono desenfadado, no sentimental, situándose en un punto de vista distante, irónico.
Sin embargo, para mantener el interés, en el desenlace quedan abiertos muchos detalles importantes. El autor renuncia a su papel omnisciente y lo narra dándole al lector la mínima, escasa y dispersa información del Pijoaparte. El lector tendrá que ir desvelando, con Manolo, de manera casi detectivesca, “el poderoso circuito de fuerzas ocultas que actuaba en torno a la orgullosa cabeza del marciano”.
Manolo será víctima de la confluencia de dos conspiraciones: la burguesa y la marginal. La primera trata de evitar que Manolo entre en el mundo burgués. La segunda quiere vengarse de él por haber querido salir del mundo al que pertenece
Mientras tanto, Teresa está aislada en la jaula dorada de la villa de Blanes, rodeada de su familia, junto a un guapo primo que no tendrá los escrúpulos del Pijoaparte respecto a la virginidad de la chica. En esas condiciones de aislamiento, ella irá dándose cuenta de sus errores, de su “tontería” y de su “romanticismo ideológico”. Parece que al final no sufre mucho. En tres ocasiones, se nos dice que, cuando supo la detención de Manolo “se echó a reír” y no hizo nada por ayudarle o por ir a verle a la cárcel. Pero el autor no se ensaña con ella, la trata como una chica inmadura, voluble, que se deja llevar, primero por la ideología progresista de moda, después por la presión de su familia.
"Las tardes con Teresa de Juan Marsé". En ABC Cultura (13 de noviembre de 2016)
FUENTES
ESTRUCH, Joan (2006): "Últimas tardes con Teresa" (presentación)
GUNDÍN VÁZQUEZ (1999): La novela de Juan Marsé: Análisis de las tendencias y de las técnicas narrativas (tesis doctoral)
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